Mario Videla nació en Salta, Argentina, el 17 de marzo de 1939, y murió en Buenos Aires, Argentina, el 16 de julio de 2023. Organista, clavecinista, flautista y docente.
El sitio www.academiabach.com.ar publicó este
recordatorio.
MARIO VIDELA
Se graduó en la
Facultad de Artes de la Universidad de La Plata en órgano y dirección coral y
completó estudios de perfeccionamiento en Alemania y Holanda. Ha ofrecido
numerosos recitales como organista, clavecinista y director. Además de su labor
como intérprete, ha realizado diversos estudios en pedagogía musical y
musicología, publicando numerosos libros didácticos de música antigua. A
comienzos de los setenta fue invitado a participar en los Festivales Bach
conducidos en Buenos Aires por Kart Richter. En 1982 y 1985 actuó con el Bach
Collegium de Stuttgart dirigido por Helmuth Rilling realizando una importante
gira por ciudades de Alemania Federal, Praga, Varsovia, Cracovia, Leipzig y
Moscú. En Europa se presentó en recitales en el Festival de Lucerna, Roma,
Madrid, Londres y Colonia. En Latinoamérica ofreció conciertos en Caracas,
México, Lima, Quito, Sao Paulo, Montevideo y Santiago de Chile, realizando
diversas grabaciones. Profesor
emérito, tuvo a su cargo la cátedra de Órgano, Canto Gregoriano, Clave y
Metodología en los Conservatorios Municipal “Manuel de Falla” y Nacional
“Carlos López Buchardo”.
Entre 1976 y 2014
se desempeñó como director artístico de la Asociación Festivales Musicales de
Buenos Aires. En 1983 funda la «Academia Bach de Buenos Aires», de la que es
director, con la que ha obtenido un sólido reconocimiento en Latinoamérica a
través de numerosos conciertos comentados. En las últimas temporadas ha
dirigido en el Teatro Colón, la Misa en Si menor, las Pasiones y Oratorios de Bach
además de oratorios de Händel y Vivaldi. En varias oportunidades ha dirigido la
Orquesta de Cámara de Chile y también la Orquesta Sinfónica Nacional.
Mario Videla
recibió varias distinciones, entre ellas el Premio Konex de Platino 1989 en
Música Clásica, en 2003 la Cruz al Mérito de la República Federal de Alemania y
en 2010 el Premio Gratia Artis otorgado por la Academia Nacional de Bellas
Artes. Desde 1997, desarrolla un programa dominical dedicado a Bach titulado
“La Cantata del Domingo” por diversas radios de Argentina, Brasil, Venezuela y
Chile.
En 1999 y 2009
formó parte del jurado de los Premios Konex. En 2006, 2008 y 2014 integró el
jurado de clave y órgano en el Concurso Internacional Johann Sebastian Bach de
Leipzig.
A continuación,
lo recordamos en el día de su fallecimiento, con su interpretación de las Invenciones
a dos voces BWV 772 781, de Johann Sebastian Bach.
La mayor parte de
las Invenciones y Sinfonías de J. S. Bach aparecen por primera vez en el
Clavier-Büchlein. (Pequeño Libro de Teclado) dedicado por el compositor en 1720
a su hijo mayor, Wilhelm Friedemann, que por entonces contaba nueve años de
edad. Estas pequeñas piezas a dos y tres voces, fueron denominadas
originalmente Preambulum y Fantasia, respectivamente.
En un segundo
manuscrito, no de la mano de Bach, cada pieza a dos voces es seguida por la
correspondiente a tres voces en la misma tonalidad, con algunos cambios y
correcciones.
En 1723, el
compositor reúne las 15 piezas a dos voces y las 15 a tres voces cambiando la
denominación Preambulum por Inventio y Fantasía por Sinfonia, siguiendo un
único orden ascendente de tonalidades desde Do mayor hasta Si menor, y agrega la siguiente introducción:
"Guía Sincera, en la que se muestra a los aficionados al teclado, y en
particular a los deseosos de aprender una manera clara, no sólo 1) de tocar
correctamente a dos voces, sino también 2) a medida que progresen, manejar bien
y con soltura, tres voces obligadas, y obtener al mismo tiempo no sólo buenas
invenciones sino también elaborarlas bien por sí mismos pero sobre todo, lograr
una manera cantable de tocar y a la vez adquirir un fuerte gusto por la
composición. Realizado por Joh.Seb.Bach, Maestro de Capilla de su Alteza
Serenísima el Príncipe de Anhalt-Cdthen, Anno Christi 1723."
La palabra
Inventio designaba, en la retórica latina de Cicerón o de Quintiliano, la
búsqueda de un tema como punto de partida de una elaboración artística, la
Elaboratio.
Es indudable el
propósito pedagógico de esta obra. Las 30 piezas (BWV 772-801) están concebidas
como estudios para el ejecutante y para el compositor en ciernes, dos
actividades que Bach consideraba inseparables.
La referencia a
una manera "cantable" de tocar, sugiere que cada voz sea capaz de
cantar su línea dentro de la polifonía. Indudablemente, el compositor requiere
del ejecutante de teclado la búsqueda de un toque que, como en un instrumento
melódico, lo acerque a la ductilidad del canto. Es probable también que muchas
de estas' pequeñas composiciones hayan sido pensadas para el clavicordio,
instrumento por el cual Bach.tenía especial predilección. Nicolaus Forkel en su
biografía de 1802, tomando como referencia los datos aportados por los hijos
mayores del compositor, escribe: "Tenía al clavicordio como el mejor
instrumento para el estudio y, en general, para el entretenimiento musical
privado. Era, según él, el más cómodo para la exposición de sus ideas más sutiles
y no creía que en ningún clave o pianoforte se pudieran producir tal variedad
de matices sonoros como en este instrumento, que si bien tenía escasa
sonoridad, era extraordinariamente dúctil en lo pequeño."