La Sinfonía Nº 8 en mi bemol mayor de Gustav Mahler es una
de las obras corales de mayor escala del repertorio orquestal clásico.
Debido a que requiere una enorme cantidad de instrumentistas
y coristas, con frecuencia se la denomina “Sinfonía de los mil”, aunque a
menudo se la interpreta con menos intérpretes, el propio Mahler no aprobó dicho
sobrenombre.
La obra fue compuesta en Maiernigg en el sur de Austria en
el verano de 1906.
Fue la última obra que Mahler estrenó en vida y contó con un
gran éxito de crítica y público cuando la dirigió en el estreno absoluto en
Múnich, el 12 de septiembre de 1910.
La fusión de la canción y la sinfonía había sido una
característica de las primeras obras de Mahler.
La octava sinfonía marca el final del período medio de
creación, donde vuelve a una combinación de orquesta y voz en un contexto
sinfónico.
La obra se divide en dos partes, la primera se basa en el
texto latino de un himno cristiano del siglo IX para Pentecostés, Veni Creator
Spiritus, Ven, Espíritu Creador y la segunda parte es un arreglo de las
palabras de la escena final del Fausto de Goethe.
Ambas están unidas por una idea común, la de la redención a
través del poder del amor, unidad transmitida mediante temas musicales comunes
y Mahler ofreció la Octava como una expresión de confianza en el eterno
espíritu humano.
Tras la muerte del compositor, las interpretaciones fueron
relativamente poco comunes, sin embargo, desde la mitad del siglo XX en adelante,
la sinfonía ha sido programada con regularidad en las salas de conciertos de
todo el mundo y se ha grabado en muchas ocasiones.
Estreno norteamericano de la obra en 1916 |
A continuación, de Gustav Mahler, la Sinfonía Nº 8 en Mi Bemol Mayor para gran orquesta, ocho
solistas, dos coros mixtos y coros de niños, en la interpretación de las sopranos Erin Wall, Ailish Tynan y Anna Lucia Richter, las mezzo-sopranos Alice Coote y Charlotte Light Kant, el tenor Nikolai Schukoff, el barítono Michael Nagy, el bajo Ain Anger,el Coro Europa Akademie, el Coro Filarmónico Checo de Brno, el Coro
de niños de la Catedral de Limburgo y Orquesta Sinfónica de la Radio de Frankfurt,
todos bajo la conducción de Paavo Järvi, en la Alte Oper Frankfurt, el 25 de mayo de 2013.