Felipe Pedrell Sabaté nació en Tortosa, España, el 19 de febrero de 1841, y murió en Barcelona, España,
el 19 de agosto de 1922. Musicólogo,
y compositor.
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Felipe Pedrell
(Felipe o Felip Pedrell i Sabaté; Tortosa, 1841 - Barcelona,
1922) Compositor y musicólogo español. Aunque su producción musical está
prácticamente olvidada, Felip Pedrell ocupa un puesto de privilegio en el
panorama musical español gracias a su labor como pedagogo y musicólogo.
Defensor de una música española entroncada en la tradición popular, Isaac
Albéniz, Manuel de Falla y Enrique Granados deben a su magisterio buena parte
del carácter hispano que impregna sus composiciones. Su aportación como musicólogo
fue fundamental en el redescubrimiento del pasado musical del país,
debiéndosele la publicación de la obra completa de Tomás Luis de Victoria.
Felip Pedrell (detalle de un retrato de Ramon Casas)
Felip Pedrell cursó sus primeros estudios musicales con Antoni Nin, maestro de capilla de la catedral de su ciudad. Sus primeros ensayos fueron un Stabat Mater, algunas danzas para orquesta, melodías y misas. En 1859 hizo su primer viaje a Barcelona, donde tuvo ocasión de oír ópera, lo que fue un gran estímulo para su vocación.
A los treinta años tenía ya escritas más de ciento veinte
obras de distintos géneros, entre las que destaca la ópera L'ultimo
Abenzarraggio, estrenada en el Teatro del Liceo de Barcelona el 14 de abril de
1874. De la misma época datan una serie de artículos en la revista España
musical, así como los opúsculos Apuntes y observaciones sobre estética musical,
Gramática musical y la pequeña enciclopedia Los problemas del pianista. Tras el
estreno de su segunda ópera, Quasimodo, en el mismo teatro (1875), escribió
varias composiciones de música sacra y se trasladó a Roma pensionado por las
Diputaciones de Tarragona y Gerona.
En 1877 se instaló en París, donde escribió la sinfonía El cant de les muntanyes, un Cuarteto de cuerda y el poema lírico Il Tasso. Su ópera Cleopatra, para la que partió de la tragedia shakesperiana sobre Marco Antonio y Cleopatra, fue premiada en Francfort. A partir de 1882 emprende con ardor infatigable diversas publicaciones, que quedan incompletas o fracasan por falta de ambiente. Es nombrado catedrático de conjunto vocal del Conservatorio de Madrid e ingresa en la Academia de Bellas Artes. Desde 1896 hasta 1899 publica el boletín mensual La música religiosa en España. En 1898 aparece en Alemania su Folklore musical castillan du XVIe siècle.
Su actividad como compositor y como musicólogo fue
asombrosa. En 1902 presencia el estreno en el Liceo de Barcelona de su ópera
catalana Els Pirineus, con libreto de Víctor Balaguer. En 1904 pasa de Madrid a
Barcelona, donde continúa su fecunda obra musical y literaria. En 1910 se
traslada a Buenos Aires para asistir al estreno de Los Pirineos en versión
castellana. En 1913 termina la publicación de las obras de Tomás Luis de
Victoria, iniciada en 1898 por encargo de una editora de Leipzig.
Con Pedrell tomó España conciencia de su pasado musical; él
señaló a las nuevas generaciones un camino de renovación al preconizar la
fusión de dos elementos que hasta entonces habían parecido antagónicos: la
música popular y la música erudita. Fue un experto compositor y un infatigable
y sagaz investigador. Los citados Albéniz, Falla, Granados y muchos otros
compositores (entre ellos Joaquín Turina, Lluís Millet y Jaume Pahissa)
siguieron y difundieron la gran lección del maestro.
A continuación, lo recordamos con el aria Ay, Tolosa y ay,
Provenza de Los Pirineos, en la versión del barítono Joan Martín-Royo, junto al
Coro y la Orquesta del Gran Teatro del Liceo, dirigida por Josep Vicent.