La Misa de Réquiem en Re Menor K. 626 de Wolfgang Amadeus Mozart, es una obra basada en los textos latinos para el acto litúrgico católico que se celebra tras el fallecimiento de una persona. Se trata de la decimonovena y última misa escrita por Mozart, que falleció antes de terminarla.
Al momento de morir, Mozart dejó tres secciones completas,
el Introitus, Kyrie y Dies Irae, del resto de la secuencia, las partes
instrumentales, el coro, voces solistas y el cifrado del bajo y órgano, e indicaciones
instrumentales y corales en el Domine Jesu y en el Agnus Dei.
En un principio Constanze Weber, su viuda, le encargó a Joseph
Leopold Eybler que terminase el Réquiem, pero fue su discípulo Franz Xaver
Süssmayr quien lo completó, en base a las directrices de Mozart.
Compuso las partes faltantes de la instrumentación, y escribió íntegramente el Sanctus. Para el Communio, y utilizó
los temas del Introito y del Kyrie, a manera de reexposición, para darle coherencia
a la obra.
Cuenta la anécdota que se presentó en casa de Mozart un
desconocido, vestido de negro que rehusó identificars, y le encargó la
composición de un réquiem. Le dio un adelanto y anunció su regreso en un mes.
Pero por ese tiempo, el compositor fue llamado desde Praga para escribir la
ópera La clemencia de Tito, para festejar la coronación de Leopoldo II. Cuando
subía con su esposa al carruaje que los llevaría a esa ciudad, el desconocido
se presentó otra vez, preguntando por su encargo. Esto sobrecogió al
compositor.
Más tarde se supo que el sombrío personaje era un enviado
del conde Franz von Walsegg, músico aficionado cuya esposa había fallecido. El
viudo deseaba que Mozart compusiese la misa de réquiem para los funerales de su
mujer, pero quería hacer creer a los demás que la obra era suya y por eso
permanecía en el anonimato.
El 10 de diciembre de 1791 se celebró una misa en memoria de
Mozart y al parecer se interpretaron fragmentos de su Réquiem, pero el estreno
de la obra completa se produjo en Viena, el 2 de enero de 1793, en un concierto
en beneficio de la viuda del músico austríaco.
La obra fue interpretada nuevamente el 14 de diciembre de
1793, durante la misa que conmemoraba la muerte de la esposa del conde Walsegg
y bajo la dirección del propio conde.
A continuación, de Wolfgang Amadeus Mozart, la Misa de
Requiem en Re Menor K. 626, en la interpretación de Carolyn Sampson, soprano; Christine
Rice, mezzo-soprano; Jeremy Ovenden, tenor, y Neal Davies, bajo; junto al Coro
Nacional de Jóvenes de Escocia, y la Orquesta Sinfónica de la BBC escocesa,
bajo la batuta de Donald Runnicles.