domingo, 30 de junio de 2024

Blanquita Amaro


Blanquita Amaro nació en San Antonio de los Baños, Cuba, el 30 de junio de 1923, y murió en Miami, Estados Unidos, el 15 de marzo de 2007. Actriz, cantante, vedette y bailarina.

El sitio www.tangoreporter.blogspot.com publicó este recordatorio firmado por Carlos G. Groppa.

Blanquita Amaro, la bailarina cubana que entre rumbas y tangos triunfo en la Argentina

Por Carlos G. Groppa

Rumbera y actriz, Blanquita Amaro fue un símbolo de la rumba cubana. De larga carrera en la Argentina, se destacó en el teatro de revistas y el cine de toda América Latina. Después de la Revolución Cubana, se exilió en Miami hasta el fin de sus días.

A pesar de ser, según el periodista Fausto Miranda, "una diva histórica de Cuba y Latinoamérica", la historia de esta consumada artista, se pierde en su propia patria por haber decidido vivir fuera de ella. Y se pierde al extremo de que ni tan siquiera aparece su nombre en el "Diccionario de la Música Cubana" de Helio Orovio, de 1981 ni en la actualizada en 1992.

Poseedora de una versatilidad que le permitió incursionar en la revista musical, el drama y la comedia por igual durante más de medio siglo, Blanquita Amaro nació el 30 de junio de 1923, en San Antonio de los Baños, provincia de La Habana. Habiendo comenzado en una pequeña carpa-teatro de su pueblo en obras dramáticas y musicales, a los nueve años ganó el primer premio en un concurso de canto en el Teatro Payret de la capital cubana.

Rosendo Rusell, en su libro "Vida y Milagros de la Farándula en Cuba", manifiesta que Blanquita, a los 13 años, tenía un cuerpo como "para discutirle el primer premio a la Miss Universo más universal que haya existido", y que "al compás de sus fabulosas caderas" hacía temblar los escenarios en cuanto teatro se presentaba.

Atraída de adolescente por los ritmos de su tierra, al serle ofrecida la oportunidad de actuar en un club nocturno de La Habana, logró una rápida popularidad.

Su simpatía, pícara sonrisa y el exaltado movimiento que le imprimía a su ágil cuerpo la convirtieron en una de las figuras más populares de aquella época, compartiendo los escenarios con las principales vedettes, en una etapa artística cubana en la que ella se destacó por su fogosa forma de bailar.

Casada con el empresario y bongosero Orlando Villegas (su director y representante), Blanquita participó en los principales programas de televisión de la Cuba republicana como "Casino de la Alegría", "Jueves de Partagás", y "El show del Mediodía", así como en los mejores espectáculos de teatro y cabaret.

En 1939 asomó en el cine cubano en las películas "Mi tía de América" y "Estampas habaneras", a las que le siguió "Embrujo antillano" (1947), uno de los films musicales más costosos de su época, con Ramón Armengod y la ya famosa vedette cubana María Antonieta Pons.

Requerida en México, donde fue bautizada como "La Reina del Mambo", actuó en las películas "Prófugos" (1940), "Hotel de verano" (1944) con Germán Valdés "Tin Tán", "Escándalo de estrellas" (1944) con Pedro Infante, y "Bésame mucho" (1945) con los tangueros argentinos Vicente Padula y el Che Reyes.

A pesar de haber desarrollado una resonante carrera en la isla, sus éxitos más importantes los cosechó en la Argentina, donde causó sensación a partir de 1947, año en que fue contratada para intervenir en la comedia musical "Malena luce sus pistolas", compartiendo una exitosa temporada en el Teatro Casino con tres de las más importantes figuras del momento, Tita Merello, Alberto Castillo y Pedro Quartucci. Su exuberante baile y su sensual canto electrificaron a los porteños. Desde entonces Blanquita pasó a ser una de las estrellas más luminosas del firmamento teatral de Buenos Aires.

Sus resplandeciente vestuario, su amplia sonrisa y ese modo de actuación sensual y gracioso al mismo tiempo la convirtieron en una de las vedettes predilectas del público local, que siguió también su labor radial en los programas "Canciones y Sonrisas de América" (1947) con Fidel Pintos, y "Belleza tropical" (1949) con Pablo Palitos.

A raíz de su éxito, fue tentada para actuar en cine, que en ese entonces atravesaba su mejor momento, y al tope en el mercado hispanoamericano gracias a la calidad de sus estrellas, Luis Sandrini, Libertad Lamarque, Nini Marshall, Hugo del Carril, Zully Moreno, Pepe Arias, Mirtha Legrand y muchísimas más.

Habiendo filmado entre 1948 y 1958 diez películas en el cine argentino, debutó con "Cuidado con las imitaciones" (1948) con el grupo cómico los Cinco Grandes del Buen Humor. Luego le siguieron "Una noche en el Ta Ba Rin" (1949) con Pepe Iglesias "El Zorro", "Buenos Aires a la vista" (1950) con Agustín Irusta, "El seductor" (1950) con Luis Sandrini, "A la habana me voy" (1950) con Tito Lusiardo, "Locuras, tiros y mambo" (1951) nuevamente con los Cinco Grandes del Buen Humor, "Una cubana en Espaa" (1951) también con Tito Lusiardo, "Bárbara atómica" (1952) con Juan Carlos Thorry, "Mi viudo y yo" (1954) con Alberto Closas, y entre otras "Casada y señorita" (1954) junto a Adolfo Stray, Pedro Quartucci, Tato Bores y el cantante Fernando Albuerne.

Dirigida por los mejores directores argentinos de ese momento, Luis César Amadori, Luis Bayón Herrera, Julio Saraceni, Enrique Cahen Salaberry, Carlos Rinaldi y otros, Blanquita brilló en esa época de oro del cine argentino con su gracia caribeña y su personal talento.

A su labor cinematográfica, radial y escénica, en la década de 1960 le agregó la televisión, al debutar en el programa semanal "El show de Blanquita Amaro" por Canal 13.

En medio de esta actividad, el tango constantemente giró a su alrededor. Su trabajo en cine y teatro, al ser compartido con tangueros de la talla de Tita Merello, Alberto Castillo, Tito Lusiardo, Agustín Irusta y otros, hizo que el tango no le fuese ajeno.

Tras permanecer casi un lustro en la Argentina viajó a Miami, donde produjo y animó su propio show televisivo.

Considerada entre las primeras vedettes cubanas de fama internacional, en 1959, en plena efervescencia de su carrera, con el arribo de Fidel Castro al poder, se exiló en Panamá, donde trabajó en televisión con otros actores cubanos, también exiliados.

Sin dejar de hacer giras por los países vecinos, en 1968 se radicó definitivamente en Miami, donde durante 28 años presentó en el Miami-Dade County Auditorium el espectáculo "Cuba canta y baila" (nombre de una vieja película musical cubana de 1951), por el cual desfilaron figuras artísticas internacionales como Olga Guillot, Tongolele, María Marta Serra Lima, Xiomara Alfaro, y otras.

En la década de 1970 volvió a los escenarios argentinos con tal repercusión, que mucho tiempo después, el conocido productor de los espectáculos revisteriles del Teatro Maipo, Carlos A. Petit, al recordar esa etapa de la revista porteña, no pudo dejar de mencionarla. "Cuando Blanquita actuaba -manifestó-, noche tras noche debía colgarse en la boletería del teatro un cartel que decía ‘No hay más localidades’, y cuando dejaba de actuar, porque filmaba o salía de gira, la recaudación descendía drásticamente a casi la mitad. Este fenómeno no se repitió nunca con ninguna figura de la revista".

A continuación, la recordamos en el día de su nacimiento, con Asi – Asi, fragmento de la película Cuidado con las imitaciones, de 1948. 




sábado, 29 de junio de 2024

El Mirador Nocturno – Radio / Cecilia Levit presenta: Tributo a Gerda Weissmann.

El Mirador Nocturno – Radio / Cecilia Levit presenta: Tributo a Gerda Weissmann.

Cecilia Levit produce semanalmente este programa que se emite por Radio Sefarad.

Gerda Weissmann: el brillo de las estrellas

TRIBUTO: HISTORIAS QUE CONSTRUYEN MEMORIA DE LA SHOÁ, CON CECILIA LEVIT – Gerda Weissmann nació en el seno de una familia judía en Bielsko, Polonia. El 3 de septiembre de 1939 los nazis invadieron su ciudad e inmediatamente la sinagoga fue incendiada y los judíos despojados de sus bienes y de su libertad. En junio de 1942 la familia de Gerda fue deportada a un gueto. Sus padres fueron enviados a Auschwitz donde perecieron en las cámaras de gas. A Gerda la enviaron al sistema de campos de Gross-Rosen, donde realizó trabajos forzados en fábricas textiles durante el resto de la guerra. Gerda fue liberada por un soldado estadounidense, Kurt Klein, con quien se casó en 1947. El matrimonio se radicó en Estados Unidos y durante toda la vida fueron activistas y dedicaron sus esfuerzos a la Educación y transmisión del Holocausto. Gerda falleció en 2022 a los 97 años.

Hacé click en el reproductor para escuchar el programa.


Yvonne Lefébure


Yvonne Lefébure nació en Ermont, Francia, el 29 de junio de 1898, y murió en París, Francia, el 23 de enero de 1986. Pianista.

El sitio www.bach-cantatas.com publicó este recordatorio.

Yvonne Lefébure (Piano, Arreglista)

Nacido: 29 de junio de 1898 - Ermont, Seine-en-Oise, Francia

Fallecido: 23 de enero de 1986 - París, Francia

Yvonne Lefébure fue una de las principales pianistas y profesoras francesas del siglo XX. Un prodigio, estudió con Maurice Emmanuel (con cuya familia permaneció unida durante toda su vida) y Charles-Marie Widor en el Conservatorio de París. También estudió con Marguerite Long, primero en una escuela privada llamada Conservatoire Femina-Musica (que proporcionó a Nadia Boulager su primer puesto docente oficial) y luego en la clase preparatoria de Long en el Conservatorio (1ère médaille). Se dice que Alfred Cortot tuvo la mayor influencia en su forma de tocar. Sus estudios primarios con A. Cortot los realizó en su clase avanzada del Conservatorio, al que ingresó en 1911 y del que se graduó con un 1er Premio en 1912. También recibió algunas lecciones privadas con A. Cortot, particularmente en los años 1919-1939 cuando ella fue una de sus principales maestras en la Ecole Normale. Todavía hubo más estudios auxiliares. Yvonne Lefebure fue una música notablemente completa y culta, cuya formación fue mucho más completa que la de la mayoría de los pianistas franceses de su época: después de obtener su primer premio en piano, se dedicó a otros temas, ganando premios en armonía, acompañamiento, contrapunto y fuga.

Yvonne Lefébure mantuvo una agenda de conciertos durante toda su vida y fue una de las favoritas de directores como Igor Markevitch, Sir Adrian Boult, Wilhelm Furtwängler y, en particular, Pablo Casals, quien la contrató regularmente en sus festivales de Prades y Perpignan de los años 1950 y 1960. A estos directores les gustó su enfoque sensato, templado por una gran sensibilidad emocional y talento artístico. Como Lefébure podía equilibrar todos estos elementos dispares con un sentido de fuerte autodisciplina y al mismo tiempo flexibilidad, la convirtió en una elección ideal en la literatura de conciertos.

Pero el trabajo de Yvonne Lefébure en la plataforma de conciertos palidece en comparación con su actividad como profesora de piano. Tuvo dos compromisos importantes a largo plazo como instructora; primero como Escuela Normal de Música de París y más tarde en el Conservatorio de París, donde enseñó hasta 1969. Continuó dando clases privadas hasta su muerte en 1986. Mientras que los nombres Samson François y Dinu Lipatti a menudo se mencionan como alumnos premiados dignos de Desde la formación de Lefébure, la lista completa de sus estudiantes se lee como un quién es quién de los concertistas de finales del siglo XX (incluidos nombres como Michaël Lévinas, Catherine Collard e Imogen Cooper). Algunos de sus comentarios y enseñanzas se reunieron en un volumen póstumo titulado La leçon de musique de Yvonne Lefébure. También habló sobre música e impartió instrucción al público en general a través de transmisiones de radio y televisión.

Lamentablemente, Yvonne Lefébure rara vez grababa. Particularmente excepcional es su grabación con Pablo Casals de Perpiñán del Concierto para piano en re menor, K. 466 de Mozart. Realizada en 1951, permaneció inédita hasta después de su muerte en 1994, ya que Columbia no pudo encontrar un "acoplamiento" apropiado para acompañarlo en el momento en que se hizo. Las grabaciones posteriores de Lefébure, durante los últimos diez años de su vida, hasta su muerte en 1986, se realizaron para el sello francés Solstice, y su grabación de las obras para piano de Ravel recibió el codiciado Grand Prix du Disque de la Académie Charles Cros. .

A continuación, la recordamos en el día de su nacimiento, con la Fantasía y fuga en Sol menor, BWV 542, de Johann Sebastian Bach.




Ludwig van Beethoven. Trío para Piano en Re Mayor Op. 70 Nº 1, denominado Fantasma. Trío Selah. Sunkyong Park en piano, Douglas Kwon en violin, y Soohyun Juhn en violonchelo.

A continuación, de Ludwig van Beethoven, el Trío para Piano en Re Mayor Op. 70 Nº 1, denominado Fantasma, en la versión del Trío Selah. Sunkyong Park en piano, Douglas Kwon en violin, y Soohyun Juhn en violonchelo.




viernes, 28 de junio de 2024

Jean-Jacques Rousseau


Jean-Jacques Rousseau nació en Ginebra, Siuza, el 28 de junio de 1712, y murió en Ermenonville, Francia, el 2 de julio de 1778. Escritor, pedagogo, filósofo, botánico, naturalista y compositor.

El sitio www.biografiasyvidas.com publicó este recordatorio.

Jean-Jacques Rousseau

(Ginebra, Suiza, 1712 - Ermenonville, Francia, 1778) Filósofo suizo. Junto con Voltaire y Montesquieu, se le sitúa entre los grandes pensadores de la Ilustración en Francia. Sin embargo, aunque compartió con los ilustrados el propósito de superar el oscurantismo de los siglos precedentes, la obra de Jean-Jacques o Juan Jacobo Rousseau presenta puntos divergentes, como su concepto de progreso, y en general más avanzados: sus ideas políticas y sociales preludiaron la Revolución Francesa, su sensibilidad literaria se anticipó al romanticismo y, por los nuevos y fecundos conceptos que introdujo en el campo de la educación, se le considera el padre del pedagogía moderna.

Biografía

Huérfano de madre desde temprana edad, Jean-Jacques Rousseau fue criado por su tía materna y por su padre, un modesto relojero. Sin apenas haber recibido educación, trabajó como aprendiz con un notario y con un grabador, quien lo sometió a un trato tan brutal que acabó por abandonar Ginebra en 1728.

Jean-Jacques Rousseau (retrato de Maurice Quentin de La Tour, 1753)

Fue entonces acogido bajo la protección de la baronesa de Warens, quien le convenció de que se convirtiese al catolicismo (su familia era calvinista). Ya como amante de la baronesa, Jean-Jacques Rousseau se instaló en la residencia de ésta en Chambéry e inició un período intenso de estudio autodidacto.

En 1742 Rousseau puso fin a una etapa que más tarde evocó como la única feliz de su vida y partió hacia París, donde presentó a la Academia de la Ciencias un nuevo sistema de notación musical ideado por él, con el que esperaba alcanzar una fama que, sin embargo, tardó en llegar. Pasó un año (1743-1744) como secretario del embajador francés en Venecia, pero un enfrentamiento con éste determinó su regreso a París, donde inició una relación con una sirvienta inculta, Thérèse Levasseur, con quien acabó por casarse civilmente en 1768 tras haber tenido con ella cinco hijos.

Rousseau trabó por entonces amistad con los ilustrados, y fue invitado a contribuir con artículos de música a la Enciclopedia de D'Alembert y Diderot; este último lo impulsó a presentarse en 1750 al concurso convocado por la Academia de Dijon, la cual otorgó el primer premio a su Discurso sobre las ciencias y las artes, que marcó el inicio de su fama.

Jean-Jacques Rousseau (óleo de Allan Ramsay, 1766)

En 1754 visitó de nuevo Ginebra y retornó al protestantismo para readquirir sus derechos como ciudadano ginebrino, entendiendo que se trataba de un puro trámite legislativo. Apareció entonces su Discurso sobre el origen de la desigualdad entre los hombres, escrito también para el concurso convocado en 1755 por la Academia de Dijon. Rousseau se opuso en esta obra a la concepción ilustrada del progreso, considerando que los hombres en estado natural son por definición inocentes y felices, y que son la cultura y la civilización las que imponen la desigualdad entre ellos (en especial a partir del establecimiento de la propiedad) y acarrean la infelicidad.

En 1756 se instaló en la residencia de su amiga Madame d'Épinay en Montmorency, donde redactó algunas de sus obras más importantes. Julia o la nueva Eloísa (1761) es una novela sentimental inspirada en su pasión -no correspondida- por la cuñada de Madame d'Épinay, la cual fue motivo de disputa con esta última.

En El contrato social (1762), Rousseau intenta articular la integración de los individuos en la comunidad; las exigencias de libertad del ciudadano han de verse garantizadas a través de un contrato social ideal que estipule la entrega total de cada asociado a la comunidad, de forma que su extrema dependencia respecto de la ciudad lo libere de aquella que tiene respecto de otros ciudadanos y de su egoísmo particular. La voluntad general señala el acuerdo de las distintas voluntades particulares, por lo que en ella se expresa la racionalidad que les es común, de modo que aquella dependencia se convierte en la auténtica realización de la libertad del individuo, en cuanto ser racional.

Ilustración de Emilio o De la educación (1762)

Finalmente, Emilio o De la educación (1762) es una novela pedagógica, cuya parte religiosa le valió la condena inmediata por parte de las autoridades parisinas y su huida a Neuchâtel, donde surgieron de nuevo conflictos con las autoridades locales, de modo que, en 1766, aceptó la invitación de David Hume para refugiarse en Inglaterra, aunque al año siguiente regresó al continente convencido de que Hume tan sólo pretendía difamarlo. A partir de entonces Rousseau cambió sin cesar de residencia, acosado por una manía persecutoria que lo llevó finalmente de regreso a París en 1770, donde transcurrieron los últimos años de su vida, en los que redactó sus escritos autobiográficos.

La obra de Jean-Jacques Rousseau

Considerado unánimemente una de las máximas figuras de la Ilustración, Jean-Jacques Rousseau aportó obras fundamentales a la teorización del deísmo (Profesión de fe del vicario saboyano), la creación de una nueva pedagogía (Emilio), la crítica del absolutismo (Discurso sobre el origen y el fundamento de la desigualdad entre los hombres, El contrato social), la controversia sobre el sentido del progreso humano (Discurso sobre las ciencias y las artes), el auge de la novela sentimental (Julia o la nueva Eloísa) y el desarrollo del género autobiográfico (Confesiones). En suma, Rousseau abordó los grandes temas de su época y participó activamente en todos los debates intelectuales que apasionaron al siglo.

Sin embargo, al tiempo que es un hombre representativo de la ideología ilustrada (con sus presupuestos basados en la razón, la naturaleza, la tolerancia y la libertad), Rousseau anuncia algunas corrientes que se difundirán a partir de la Revolución. Así, por un lado, el pensador ginebrino puso en circulación determinadas ideas que cuestionaban el optimismo radical de las Luces: la perfección del estado de naturaleza frente a la corrupción de la sociedad comprometía la confianza en el progreso de los ilustrados; la idealización del buen salvaje se enfrentaba a la del "innoble salvaje" de los economistas que estudiaban los medios para el desarrollo material de la humanidad, y el énfasis sobre el sentimiento y la voluntad podía mermar la confianza ilustrada en el imperio de la razón.

Por otro lado, sus propuestas políticas no sólo desbarataban las ilusiones puestas en el reformismo benevolente de los déspotas ilustrados, sino que ofrecían un modo alternativo de organización de la sociedad y lanzaban una inequívoca consigna contra el absolutismo de derecho divino al defender el principio de la soberanía nacional y la voluntad general de la comunidad de los ciudadanos, postulando en consecuencia como justas aquellas formas de gobierno (como la democracia) en que dicha voluntad general puede expresarse.

De este modo, Rousseau se situaba en la encrucijada de la Ilustración, alimentando al mismo tiempo las corrientes subterráneas que inspiraron el prerromanticismo y las fuentes doctrinales de donde brotará pujante la Revolución. Pese a esgrimir argumentos no demasiado sólidos, su primer texto importante, el Discurso sobre las ciencias y las artes (1750), es la clave para entender su reticencia frente al optimismo racionalista que creía firmemente en el progreso de la civilización.

Rousseau se alejaba ya en esta obra del pensamiento ilustrado al atribuir escasa importancia al perfeccionamiento de las ciencias y conceder mayor valor a las facultades volitivas que a la razón. Contestando la unilateralidad de una visión del progreso ceñida al ámbito técnico y material, en detrimento del moral y cultural, denunció la incongruencia que suponía denominar progreso humano a lo que era un mero desarrollo tecnológico. Aunque se había avanzado en el dominio de la naturaleza y se había aumentado el patrimonio artístico, la civilización no había hecho al hombre más libre, más feliz o más bondadoso.

Jean-Jacques Rousseau

La empresa de dilucidar los efectos de la organización social sobre la naturaleza humana la acometió en el Discurso sobre el origen y el fundamento de la desigualdad entre los hombres (1755). Si en escritos anteriores ya había teorizado sobre la bondad natural del hombre y el efecto corruptor de la sociedad, ahora pasó a desarrollar la idea del buen salvaje. En un primitivo estado de naturaleza no existían entre los humanos desigualdades relevantes (sólo las derivadas de la biología) y los hombres no eran ni buenos ni malos, sino simplemente "amorales". Una serie de causas externas empujaron a los hombres a agruparse y prestarse ayuda mutua para determinadas empresas, y en el transcurso de esa asociación nacieron las pasiones que transformaron su espíritu.

Ese "estado de naturaleza" era esencialmente un concepto teórico, pero ofrecía a Rousseau la base para condenar las injusticias del mundo de su tiempo, advertir sobre la corrupción reinante y desenmascarar el desorden de la sociedad civil. Así, partiendo de un estadio asociativo primitivo e idílico, nucleado en torno a la familia y más tarde traspasado a la comunidad (a la que inspiraba la solidaridad y guiaba la costumbre y no la ley, repartiéndose el fruto de la caza), llegó a determinar el momento de la fractura: la aparición de la agricultura, la minería y, por ende, la propiedad privada y la acumulación de riquezas en manos de unos pocos.

El proceso continuaba con la aparición de la servidumbre, consistente en que los desposeídos ofrecían su trabajo a cambio de la protección de los poderosos. Los abusos propiciaron la desconfianza mutua y la necesidad de prevenir el crimen, por lo que se hizo necesaria la instauración de un gobierno y la promulgación de leyes para la protección de la propiedad privada. Si hasta aquí el esbozo de esta evolución no era nuevo (ya había sido apuntado por John Locke), la originalidad consistía en matizar que el proceso se había operado en defensa de la propiedad de los ricos; de ahí el carácter revolucionario de la hipótesis.

Primera edición de El contrato social (1762)

Claro es que Rousseau no abogaba por la abolición de la propiedad privada, a la que consideraba un hecho irreversible y por tanto inherente al estado de sociedad, sino que apuntaba hacia la mejora de la situación a través del perfeccionamiento de la organización política. En cuanto diagnosis del origen de la injusticia social y la infelicidad del hombre, el Discurso tiene en efecto su necesario complemento en otra de sus obras fundamentales, El contrato social (1762), con su propuesta de una nueva sociedad fundada sobre un pacto libremente aceptado por los individuos, de los que emana una voluntad general que se expresa en la ley y que concilia la libertad individual con un orden social justo.

Si bien no es posible contraponer una Ilustración de la razón y otra del sentimiento (pues precisamente entre los fenómenos más característicos de las Luces se encuentran la exaltación de la naturaleza, la revolución de la afectividad o el triunfo de la privacidad), no cabe duda de que el énfasis rousseauniano sobre la reivindicación del sentimiento frente a la razón pura, la idealización arcádica de la naturaleza y la indagación obstinada en el secreto reducto de la intimidad son elementos que preludian la aparición del nuevo clima espiritual del prerromanticismo.

En este sentido, Rousseau colaboró decisivamente en la difusión de una estética del sentimiento con la publicación de su novela La nueva Eloísa (1761), aunque no sea ni el único escritor de novelas sentimentales ni el único responsable de los melodramas lacrimógenos que siguieron (las denominadas pleurnicheries). La bondad del hombre en un ideal estado de naturaleza es la base de una obra destinada a inaugurar la pedagogía moderna: Emilio o De la educación (1762); por ello la labor educativa ha de llevarse a cabo al margen de la sociedad y de sus instituciones y no consiste en imponer normas o dirigir aprendizajes, sino en impulsar el desarrollo de las inclinaciones espontáneas del niño facilitando su contacto con la naturaleza, que es sabia y educativa.

Por otro lado, sus Confesiones (publicadas póstumamente en 1782 y 1789) representan, en un siglo inclinado a la autobiografía, un ejemplo excepcional de introspección personal y de exhibición extremada de la propia intimidad, en un grado que no se alcanzaría hasta el pleno romanticismo. Finalmente, no resulta extraño que la muerte le sorprendiera meditando en la soledad de los jardines a la inglesa del castillo de Ermenonville, donde le había invitado el marqués de Girardin, mientras se entregaba al ilustrado placer de la herborización, tal como había dejado descrito en Las ensoñaciones del paseante solitario, publicadas también póstumamente en 1782.

La dualidad de la figura y la obra de Rousseau no pasó desapercibida a sus coetáneos, como demuestran las palabras de Goethe: "Con Voltaire termina un mundo, con Rousseau comienza otro". Un mundo que, por un lado, conducía al romanticismo (debido al avance del irracionalismo, la exacerbación del sentimentalismo, el auge de los nacionalismos y la revalorización de las oscuras edades medievales) y, por otro, a la Revolución.

A continuación, lo recordamos en el día de su nacimiento, con el Motete Salve Regina, en la versión de la soprano Carolyn Sampson, y el Ensamble Ex Cathedra, dirigido por Jeffrey Skidmore.




jueves, 27 de junio de 2024

Magali Noël


Magali Noëlle Guiffray, más conocida como Magali Noël, nació en Esmirna, Turquía, el 27 de junio de 1931, y murió en-Chateauneuf-Grasse, Francia, el 23 de junio de 2015. Actriz y cantante.

El sitio www.ambito.com publicó este recordatorio.

Paris - La cantante y actriz francesa Magali Noël, que interpretó "Fais-moi mal Johnny", de Boris Vian, puso rostro a los deseos eróticos de Federico Fellini en películas como "La Dolce Vita" (1960) y encarnó al sensual personaje de Gradisca en "Amarcord" (1973), murió a los 83 años, informó ayer su hija. Noël, con cierto aire a Sofia Loren, debutó como cantante de cabaret y se lanzó al cine en los 50, cuando los rostros femeninos más célebres del cine francés eran el de Brigitte Bardot, Jeanne Moreau, Annie Girardot y el suyo. Con cerca de 80 películas en su filmografía, su primer éxito llegó en 1956 de la mano de Jean Renoir, en "Elena et les Hommes", que le abrió un camino muy ligado al cine italiano de Giorgio Simonelli, Luciano Emmero, Giorgio Bianchi, y también con Costa-Gavras o Denis Parent, director en 2003 de su última película, "Rien que du bonheur". Pero se la recordará siempre por dar vida a algunas de las fantasías sexuales de Fellini, como el personaje de Gradisca, que obsesiona a los muchachos que pueblan los recuerdos del director italiano en "Amarcord". En Francia, se le aprecia especialmente como cantante, gracias en gran medida a "Fais-moi mal Johnny".

A continuación, la recordamos en el día de su nacimiento, con Fais-moi mal Johnny.




miércoles, 26 de junio de 2024

Jacob Druckman


Jacob Druckman nació en Filadelfia, Estados Unidos, el 26 de junio de 1928, y murió en New Haven, Estados Unidos, el 24 de mayo de 1996. Compositor.

El sitio www.boosey.com publicó este recordatorio.

Jacob Druckman, uno de los compositores estadounidenses contemporáneos más destacados, nació en Filadelfia en 1928. Después de una formación temprana en violín y piano, se matriculó en la Juilliard School en 1949, donde estudió composición con Bernard Wagenaar, Vincent Persichetti y Pedro Menino. En 1949 y 1950 estudió con Aaron Copland en Tanglewood; Posteriormente continuó sus estudios en la Ecole Normale de Musique de París (1954-55).

El crítico Mark Swed ha escrito: "En el corazón de las obras de Jacob Druckman se encuentra el gesto dramático audaz, seguro ya menudo sorprendentemente físico... Sin embargo, las partituras de Druckman siempre han exhibido también otra característica: la de una estructura cuidadosa, construida con atención meticulosa al detalle. El proceso de integración de estos dos lados de su carácter... ha sido un factor constante a lo largo del desarrollo del compositor".

Druckman produjo una lista sustancial de obras que abarcan medios orquestales, de cámara y vocales, y realizó un trabajo considerable con música electrónica. En 1972 recibió el premio Pulitzer por Windows, su primer trabajo para gran orquesta. Entre sus numerosas subvenciones y premios se encuentran una Beca Fulbright en 1954, un premio de la Fundación Thorne en 1972, Becas Guggenheim en 1957 y 1968, y el Premio de Publicación de la Sociedad para la Publicación de Música Estadounidense en 1967. Las organizaciones que encargaron su música incluyeron Radio Francia (Shog, 1991); la Orquesta Sinfónica de Chicago (Brangle, 1989); la Filarmónica de Nueva York (Concierto para viola y orquesta, 1978; Aureole, 1979); la Orquesta de Filadelfia (Contrapoise, 1994); la Sinfónica de Baltimore (Prisma, 1980); la Orquesta Sinfónica de St. Louis (Mirage, 1976); el Cuarteto Juilliard (Cuarteto de cuerda n.º 2 , 1966); la Fundación Koussevitzky en la Biblioteca del Congreso (Ventanas , 1972); IRCAM (Animus IV, 1977); y muchos otros. También compuso para teatro, cine y danza.

Druckman enseñó en la Juilliard School, Bard College y Tanglewood; Fue además director del Estudio de Música Electrónica y profesor de Composición en el Brooklyn College. También estuvo asociado con el Centro de Música Electrónica Columbia-Princeton en la ciudad de Nueva York. En la primavera de 1982, fue Residente de Música en la Academia Americana de Roma; en abril de ese año, fue nombrado compositor residente de la Filarmónica de Nueva York, donde cumplió dos mandatos de dos años y fue director artístico del festival de música HORIZONS. En los últimos años de su vida, Druckman fue profesor de composición en la Escuela de Música de la Universidad de Yale.

Muchas de las obras de Druckman han sido grabadas por Deutsche Grammophon, Nonesuch, CRI, New World y otros sellos. Las grabaciones recientes incluyen Aureole (Sinfónica de St. Louis/Slatkin en New World), Prism (Filarmónica de Nueva York/Mehta, New World); y Nor Spell Nor Charm (orquesta de cámara Orfeo, Deutsche Grammophon).

Jacob Druckman es una publicación de Boosey & Hawkes. Abril de 2010.

A continuación, lo recordamos en el día de su nacimiento, con Prisma, para gran orquesta, en la versión de la Orquesta Filarmónica de Nueva York, dirigida por Zubin Mehta.




martes, 25 de junio de 2024

David Paich


David Frank Paich nació en Los Ángeles, California, Estados Unidos, el 25 de junio de 1954. Compositor, cantante y teclista.

El sitio www.scienceofnoise.net publicó este recordatorio firmado por Jordi Tàrrega.  

David Paich – Forgotten Toys

El tiempo pasa y el genial David Frank Paich, teclista y vocalista de Toto, ya tiene 68 años… Es impresionante cómo pasa el tiempo, pero, curiosamente, el hombre que compuso “Hold the Line” y “Africa” no había editado un disco propio hasta día de hoy. Parece increíble, pero ha estado muy ocupado participando en centenares, posiblemente… miles de discos como compositor, músico, arreglista y demás.

Puede que el nombre de David Paich de entrada no te diga gran cosa, pero entre sus muchos logros recordemos que estuvo grabando en el disco más vendido de la historia: Thriller de Michael Jackson. Es más, estuvo en la misma habitación trabajando con Paul McCartney y el Rey del Pop. Seis Grammys, un Emmy y una extensa lista de nombres con los que ha trabajado tales como Elton John, Tina Turner, George Benson, Chicago, Rod Stewart… Y estamos mencionando una pequeñísima parte.

El disco cuenta con las participaciones de Brian Eno de Roxy Music, Michael McDonald de The Doobie Brothers, Ray Parker Jr. (sí, ¡el de Cazafantasmas!), Don Felder de The Eagles y el baterista Steve Jordan (Blues Brothers y sustituto de Charlie Watts en los Rolling Stones). Un elenco que puede parecer corto, pero es que hay muy pocos temas aquí. El disco no llega ni a la media hora de duración.

Tras la intro de rigor nos sumergimos en la musicalidad y clase absoluta de un tema muy Toto, “Willbelongtoyou”, lleno de matices y muy melódico en el que la voz del gran Paich es absolutamente rotunda. Gran solo de su amigo y compañero Steve Lukather y esa sensación de que en los arreglos hay dejes de música del mundo. Y genial ese sutil riff silbado.

El single clarísimo es “Spirit of the Moonrise”, muy evocadora en el verso y con un estribillo muy épico con un excepcional Michael McDonald a la voz. Participa también la voz de otro de sus grandes compañeros en Toto como es Joseph Williams. Hay un bonito lyric video bastante cautivador que te demuestra que las ideas sobrantes de este hombre dan para temas realmente enormes. Está todo muy por encima de la media… pero en general ha quedado un poco de cajón de sastre.

Posiblemente sea cosa mía, pero en el inicio de la suave y sexy “First Time” me imagino a Michael Jackson cantándola y bordándolo. Hay arreglos sutiles con sintetizador e incluso metales en el que me parece el mejor tema del disco. La aparición de esa voz femenina invitada es otro de los lujos del disco. A medida que avanza el disco la sensación de que la composición encaja perfectamente en Toto es total.

Quizá el corte más directo y sencillo es “Queen Charade”, con esos arreglos de viento y esa potencia en un blues rock endurecido con mucho pedigrí, repuntado por voces femeninas, armónica y un piano juguetón. Aquí el guitarra de The Eagles pone mucho de su parte. En “All the Tears that Shine” entramos en terrenos casi baladísticos y algo sobreproducidos, con esos teclados y loops envolviendo la canción con clase. Pero tiene un aire casi de villancico que para un servidor le hace perder muchos enteros.

Lo más experimental viene al final en “Lucy” y esa concesión a su otro yo que es la fusión. Es jazz instrumental muy potente, todo instrumental, pero con una fuerza y una calidad que hace que tus pies no paren de moverse. Es lo grande de Paich, que puede componerte algo tan grande como “Africa” porque él ha mamado de mil estilos, técnicas y músicas del mundo. Es el ejemplo de cómo hacer de la globalidad musical algo que parezca sencillo y directo.

Maestro absoluto y genio en la sombra. Paich ha sido uno de los arquitectos de la música popular en los últimos 50 años. Su salud le permite lo que le permite, y ya que la pandemia le ha dado tiempo, ha hecho como sus compañeros Lukather y Williams: sacar un disco en solitario, el primero de toda su vida. Sorprende que tantos años den para seis canciones y una intro, pero quizá el resto de sus viejas ideas tiene tanta calidad que da para hacer un nuevo disco de Toto.

A continuación, celebramos su cumpleaños, con Queen Charade.




lunes, 24 de junio de 2024

El Mirador Nocturno – Radio / Cuentos Historias y Relatos: El pequeño escribiente florentino – Edmundo de Amicis.

Una selección de textos de distintos autores y tiempos para disfrutar en silencio. Reflexiones, pensamientos, frases y poesía para acompañarte allí donde te encuentres.

Hoy: El pequeño escribiente florentino – Edmundo de Amicis.

Hacé click en el reproductor para escuchar el programa.




Juan Criado


Juan Criado Delgado nació en Callao, Perú, el 24 de junio de 1913 y murió en Lima, Perú, el 13 de mayo de 1978.​Futbolista, cantautor y compositor.

El sitio www.dechalaca.com publicó este recordatorio firmado por Roberto Castro.

Juan Criado: Jarana bajo los tres palos

Escrito por Roberto Castro (Twitter: @rcastrolizarbe)

Friday, 31 de October de 2008

El Día de la Canción Criolla es propicio para recordar a un futbolista que se hizo querido no solo por sus dotes en el arco, sino por su otra pasión: la música. 'Juanito' Criado, el llamado 'Arquero Cantor', hizo historia no solo en los cuatro clubes por los que atajó o en el afamado Combinado del Pacífico, sino a través de su labor como cantautor criollo, con lo cual ha dejado un doble legado difícil de imitar.

Juan Criado Delgado nació, por algo, un 24 de junio de 1913 en el Callao. Aquel día, entre tantas otras efemérides, se conmemora la Fiesta de Amancaes, celebración criolla si las hay, evocada en el inmortal valse José Antonio por Chabuca Granda.

Uno de los primeros equipos cremas en los que destacó 'Juanito' Criado, en 1931 (Foto: libro ¡Y dale U...!, Enrique Roel Miranda) Le dijo alguna vez Criado a la revista Equipo que uno de sus recuerdos de más pequeño era del restaurante que administraba su padre en la calle Huancavelica, donde los comensales acostumbraban cargarlo encima del mostrador para que el bebé Juanito siguiera algún compás musical cantando o bailando. Y que su anécdota escolar favorita era una de la Primaria que estudió en el colegio de la Inmaculada, donde el Hermano García, uno de los religiosos más queridos del plantel, lo obligó a pararse en el arco para completar una oncena bajo el argumento de que era físicamente parecido a Ricardo Zamora 'El Divino', el gran arquero español que estaba de moda por la época.

Con sus compañeros de zaga en la 'U': Arturo Fernández y Ricardo del Río (Foto: archivo José Augusto Giuffra) De esa mezcla surgió el que sería un cantante por vocación y un arquero por formación. El famoso 'Arquero Cantor'.

Criado para atajar

Con los muchachos de su barrio, Monserrate, 'Juanito' fundó un equipo llamado Defensor Perú, con el que alineó varios años en torneos de menores. En 1927, fue llamado por el Deportivo Unión, equipo que jugaba en la División Intermedia (segunda categoría de la época). Debutó en un cotejo ante el Ferrocarril Tarapacá y no le fue bien: recibió tres goles. Flanqueado por los hermanos Fernández: su amigo Arturo y el joven 'Lolo', que empezaba a emerger como piloto de ataque en la 'U' (Foto: libro Lolo, Ídolo Eterno, Teodoro Salazar Canaval)Pero ello no lo amilanó y ese año fue protagonista de la campaña de ascenso del Unión, que a partir de 1928 se hizo estable en la División de Honor (primera categoría).

En 1931 dio el gran salto: luego de cumplir buenas actuaciones con el Unión en una gira a Ecuador, fue llamado por su buen amigo Arturo Fernández para sumarse a la entonces Federación Universitaria (hoy Universitario de Deportes) para sumarse a sus filas. En aquel equipo, en el que hacía sus pinitos el hermano menor de Arturo, un tal 'Lolo', Criado sumó dos subcampeonatos en 1932 y 1933 y una exitosa gira a Chile, la cual resultó clave para que fuera incluido junto a Juan Valdivieso como arquero del Combinado del Pacífico que hizo una extensa gira de 39 partidos a Europa (ganando 13, empatando 13 y perdiendo 13).

Con el 'Combinado del Pacífico' en Europa. De pie: Montero (chileno), Arce, Criado, 'Lolo' Fernández, Luco (chileno), Tovar, Arturo Fernández y Alegre. Abajo: Subiabre (chileno), Villanueva y Saldarriaga (Foto: libro Lolo, Ídolo Eterno, Teodoro Salazar Canaval) Al regreso, Criado participó de la buena campaña hecha por el ya Universitario en el torneo de 1934, que acabó en la conocida polémica por el título entre el cuadro crema y Alianza Lima. Luego participó de la preparación de la selección que jugó el Sudamericano extraordinario de 1935 en Lima, pero no llegó a jugar porque el titularato estaba reservado para el 'Mago' Valdivieso. No obstante, ese proceso sería decisivo para su vida.

Nace el 'Arquero Cantor'

En las concentraciones para el Sudamericano, con el propósito de disipar el ambiente, Criado compuso una canción criolla a la que denominó Concentración de Bellavista. Fue entre valse y valse que surgió el apelativo que lo perennizaría: el de 'Arquero Cantor'. Contrariamente de lo que podría creerse, este apodo surgió en esta época y no fue copiado del argentino Julio Elías Musimessi, En la puerta del 'Muni' campeón de 1940 (Foto: echamuni.net) golero que recién en 1944 debutó en Primera División con camiseta de Newell's Old Boys y luego triunfara en Boca Juniors, a quien se apodaba de la misma manera por su afición a la canción litoraleña, un ritmo folclórico argentino.

Pero paralelamente Criado seguía tapando, y en 1936 decidió cambiar de camiseta para pasar a filas del Deportivo Municipal, que se aprestaba para debutar en la División de Honor. Con los ediles conformó un equipo de polendas, que apenas en su segunda temporada en la máxima categoría consiguió su primer título. En aquel equipo de la 'Academia' de 1938 ya empezaba a brillar con luz propia Luis 'Caricho' Guzmán, y también destacaban 'Pipo' Ortega en la zaga, Pablo Pasache en el medio y 'Pichín' Bielich en el ataque.

En uno de sus hábitats: el arco volando de palo a palo (Foto: libro ¡...Y dale U!, Enrique Roel Miranda) Al año siguiente, Criado ofreció el que tal vez sería el mejor partido de su carrera. Un empate a dos goles contra su ex equipo, Universitario, en el que -de acuerdo con escritos del periodista 'Lolo' Carrera- acabó siendo cargado en hombros al final del cotejo. Con Alianza Lima descendido en aquel 1939, eran los albores del llamado 'Clásico Moderno' entre ediles y cremas.

En 1940, el 'Arquero Cantor' conseguiría su segundo título con la 'Academia'. Ya no estaba Bielich, fallecido en un trágico accidente automovilístico, pero había llegado al club un mozo llamado Roberto Drago que perennizaría su sobrenombre 'Tito' entre la fanaticada edil. En sus últimos años, poco antes de retirarse en Tabaco (Foto: revista Equipo) Tampoco estaba Ortega en la defensa, pero sí Enrique Perales, un sobrio zaguero que luego prolongaría la dinastía de su apellido en el cuadro de la franja con sus hermanos Agapito y Constantino.

Cantar consagratorio

En Municipal, volvió a ganar un título: en 1943, pero ya como suplente de Jaime Sacco. En búsqueda de mayor continuidad, para 1946 -a instancias de su amigo 'Pipo' Ortega'- cambió la camiseta edil por la de Sporting Tabaco, pero no atajó mucho y, luego de un cotejo ante Mariscal Sucre, optó por colgar los chimpunes luego de sentir que ya no era el mismo de antes.

Con su conjunto Patria, Amistad y Criollismo en el set de Radio Libertad (Foto: revista Equipo) Luego de ello, Criado estudió en la Escuela Técnica de Entrenadores y fungió como preparador físico en Universitario y Tabaco, pero a la vez se dio espacio para desarrollar su otra pasión: la música criolla. Y cuando el tiempo empezó a faltarle, acabó dejando del todo el fútbol para desarrollar su conjunto llamado Patria, Amistad y Criollismo, y vaya si lo hizo con éxito.

En épocas en las que la radio emitía contenidos musicales en vivo, Criado era infaltable en las ondas de Radio Libertad de 1 a 3 de la tarde para amenizar con su conjunto las horas de almuerzo de los limeños. Compuso así más de 30 canciones, entre las cuales destacó la polca Angélica. El 'Arquero Cantor' en toda su expresión (Foto: libro ¡...Y dale U!, Enrique Roel Miranda) También dedicó tiempo al festejo, pues era aficionado a los ritmos negroides. Todo ello, paralelamente a su trabajo como empleado en la sección Sanidad de la Municipalidad de Lima.

Juan Criado Delgado falleció, por algo, un 13 de mayo de 1978 en Lima. Aquel día se conmemoraba un aniversario más de la partida de Luis Felipe Pinglo Alva, acaso el ícono más grande de la música criolla y al que 'Juanito' tanto admiró a lo largo de su vida. Dejó para el criollismo un legado musical reconocido por cuanto círculo experto en la materia existe. Y al fútbol, el recuerdo de un arquero que supo hacerse de un nombre pese a contar con contemporáneos de fuste en el puesto -Pardón, Valdivieso, Honores-, entre los cuales su cantar supo volar bajo los tres palos.

A continuación, lo recordamos en el día de su nacimiento, con Yo te perdono.




domingo, 23 de junio de 2024

Shalom – 20 años de Radio Sefarad.


Shalom – 20 años de Radio Sefarad. Entrevista a su director Jorge Rozemblum.

Hacé click en el enlace para ver el programa.

https://www.rtve.es/play/videos/shalom/23-06-24/16158925/ 

 

Jacobo Langsner


Jacobo Langsner nació en Romuli, Rumania, el 23 de junio de 1927, y murió en Buenos Aires, Argentina, el 10 de agosto de 2020.​ Dramaturgo y escritor.

El sitio www.elpueblodigital.uy publicó este recordatorio firmado por Jorge Pignataro.

Jacobo Langsner: hace un año fallecía el autor de “Esperando la carroza”

Por Diario EL PUEBLO / Papel -15 de agosto de 202102

Por: Jorge Pignataro

Este mes, el 10 concretamente, se cumplió un año más de la muerte de Jacobo Langsner, un dramaturgo fundamental en la cultura uruguaya. Seguramente “Esperando la carroza” sea su obra más recordada, pero vale decir que es un autor que compuso más de 20 piezas para teatro, con un destacadísimo nivel y trascendencia a los más diversos países.

“Esperando la carroza” (igual que otras de sus obras) fue en algunas ocasiones llevada al cine, y en Salto no son pocos los que recuerdan su puesta en escena: fue en el Teatro Larrañaga, con dirección de Óscar Bibbó, hace ya unos cuantos años.

Jacobo Lagsner fue rumano de nacimiento (Romuli, 23 de junio de 1927), aunque nacionalizado uruguayo. Falleció en Buenos Aires el 10 de agosto de 2020. Un dato no menor es que se han destacado en obras suyas actrices de la talla de China Zorrilla, Estela Medina y Maruja Santullo.

EL PUEBLO decide homenajearlo esta vez, a un año de su muerte, con estas palabras de María Rosa Carbajal Spagnulo, alguien que ya hace más de 45 años se dedica, en Montevideo, a la actividad teatral y al periodismo cultural especializado en teatro:

“Hoy se cumple un año del fallecimiento de Jacobo Langsner, el dramaturgo de la «observación social profunda». De origen rumano, su familia emigró a Uruguay en 1930.

Fue considerado uno de los mayores dramaturgos rioplatenses surgidos después de la década del 50. Estrenado tanto en Montevideo como en Buenos Aires, se ha destacado por su labor en teatro, así como por sus libretos para cine y televisión. Su nombre sorprende en 1951 con el estreno de El hombre incompleto (Sala Verdi, Compañía Mecha Bustos). Luego llegaron La rebelión de Galatea, Los ridículos y El juego de Ifigenia que supuso el primer reconocimiento de la crítica, que se ampliará en 1954 con Los artistas (Club de Teatro).

A fines de los 50 Langsner se traslada a Buenos Aires, período en el que trabaja en forma simultánea en ambas márgenes del Río de la Plata. Durante ese período, en 1962, la Comedia Nacional estrena uno de sus títulos más emblemáticos, Esperando la Carroza. Su consagración definitiva llegará cuando vuelva a Montevideo, con el estreno de El tobogán (Teatro Odeón, compañía China Zorrilla), La Gotera (El Galpón), Un agujero en la pared (Comedia Nacional) y Pater Noster (Teatro Alianza).

En 1975 debe emigrar a Madrid donde trabaja en la televisión española y sueca, hasta 1981, cuando regresa a Montevideo poco antes del retorno a la democracia. Posteriormente se radica en Buenos Aires donde reside hasta su muerte. De sus libretos cinematográficos se filmaron Darse cuenta, Malayunta, Sofía, De mi barrio con amor, Besos en la frente y Esperando la carroza.

Para la televisión argentina escribe Obras maestras del terror, Alta comedia, Alguien como usted, Contracara, Atreverse.

La crítica nacional lo reconoció con el Premio Florencio en la Categoría Texto de Autor Nacional por la obra El Tobogán.

En Argentina obtuvo el Premio Argentores en varias oportunidades por su labor en teatro y en cine. Su trabajo como guionista de televisión también fue destacado por Aptra y Argentores.

Recientemente, en 2019, en Las Regionales del Teatro del Interior se presentó su texto «Barbacoa», por Grupo Teatral El Garage, con dirección de Lilette Charbonnier.

Sin dudas fue el dramaturgo que supo captar los entretelones de las familias de clase media con humor, sarcasmo y su proverbial toque dramático en ocasiones muy ajustado. Observador y crítico de esta sociedad dio al Teatro las mejores pinturas de la decadencia humana. ¡Gracias por todo, gracias por tanto!”

A continuación, lo recordamos en el día de su nacimiento, con un fragmento de una charla que ofreció China Zorrilla, en mayo de 2002 en Washington, Estados Unidos, con recuerdos de su vida, y las películas de Jacobo Langsner.




sábado, 22 de junio de 2024

El Mirador Nocturno – Radio / Cecilia Levit presenta: Tributo a Leo Bretholz.


El Mirador Nocturno – Radio / Cecilia Levit presenta: Tributo a Leo Bretholz.

Cecilia Levit produce semanalmente este programa que se emite por Radio Sefarad.

Leo Bretholz: un salto a la oscuridad

TRIBUTO: HISTORIAS QUE CONSTRUYEN MEMORIA DE LA SHOÁ, CON CECILIA LEVIT – Leo Bretholz nació en Viena en 1921. Sus padres, Max y Dora, eran inmigrantes polacos. Leo tenía dos hermanas menores. Su padre era sastre y su madre bordadora. El sentimiento antisemita aumentó después de la anexión de Austria por parte de Alemania en 1938. Leo huye de Austria hacia Bélgica y en 1940 Alemania invadió Bélgica y Leo fue deportado a un campo de refugiados. En 1942 fue enviado al campo de tránsito de Drancy, y deportado en el convoy 42 al campo de exterminio de Auschwitz. Logró saltar del tren y con la ayuda de la resistencia, obtuvo papeles falsos con el nombre de “Max Henri Lefevre” y trabajó para la resistencia falsificando documentos y localizando tropas alemanas. Después de la liberación, Leo trabajó con refugiados en Limoges, Francia. Su madre, sus hermanas y otros 55 familiares perecieron en el Holocausto. En 1947 Leo emigró a los Estados Unidos.

Hacé click en el reproductor para escuchar el programa.


Katherine Dunham

Dwigth Carter

Katherine Mary Dunham nació en Glen Ellyn, Illinois, Estados Unidos, el 22 de junio de 1910, y murió en Nueva York, Estados Unidos, el 21 de mayo de 2006. Bailarina, coreógrafa y antropóloga.

El sitio www.animaljazz.es publicó este recordatorio.

Katherine Dunham, una historia de baile

Actualizado: 13 may

La historia del baile está plagada de pequeñas historias de bailarines y bailarinas que, de una forma u otra, revolucionaron la danza en un momento clave de la historia. No solo una revolución del baile en los movimientos, sino también en los conceptos, los valores y la cultura. En este artículo hablamos de la bailarina, coreógrafa, profesora, directora y antropóloga de los bailes primitivos africanos Katherine Dunham.

Sus primeros años en el baile y cómo va trazando la dirección de su carrera como bailarina

Katherine Dunham fue una mujer afroamericana que nació en el seno de una familia pobre de Chicago en 1910. Tuvo una vida profesional larga y diversa dedicada al baile: fue bailarina, coreógrafa y profesora. Y se convirtió en directora cuando, en 1931, fundó su primer estudio de danza en Chicago. Además, estudió antropología al ganar una beca en la Universidad de Chicago y se doctoró en danzas primitivas del Caribe sumergiéndose de lleno en los bailes de aquellas culturas. Entre 1936 y 1937 viajó a Haití, Jamaica, Trinidad y las Islas Martinicas y estudió y documentó sus danzas y movimientos. Su obsesión era investigar por qué los negros bailaban cómo bailaban. Y cuanto más observaba, decía, más entendía.

En 1940 fundó la primera compañía de baile de los Estados Unidos formada por bailarines y bailarinas afroamericanas en su totalidad. En esa época, si eras bailarín o bailarina negra en Estados Unidos se te otorgaba, directamente, la etiqueta de “negro dancer”. Y ese término marcaba un límite. Es decir, podías aspirar a bailar tap, shake o a ser contorsionista, pero no mucho más. Quizás podías llegar a bailar en un Chorus line si eras mujer y tenías la piel clara. El caso es que a las personas negras no se les permitía estar en otros escenarios que no fueran esos, y Dunham trabajó duro para dignificar todo ese material que había aprendido durante sus viajes al Caribe. Mezcló con maestría todos esos bailes ancestrales de origen africano con todo el bagaje que había aprendido del ballet clásico y del baile moderno europeo. Transformó el baile y trabajó duro para llevar todo ese material al escenario de la forma más honesta y consciente posible.

Esta es una canción típica de los ritmos caribeños que ella vivió en sus viajes al Caribe. Nos adentra muy bien a toda la cultura de baile que estamos a punto de descubrir. Se trata de la canción del principio de este vídeo.

Integración del baile afrocaribeño: La Técnica Dunham

Así pues, cuando ella volvió del Caribe, enseñó a su compañía de danza algo muy fundamental de la cultura que estaba estudiando y que iba más allá del puro movimiento: la dimensión espiritual del baile que tenía como premisa sacar y expandir los sentimientos relativos al ser humano tales como el dolor, la injusticia, la muerte, la vida o la emoción.Y esa fue una de las primeras grandes revoluciones de Dunham y de la llamada “Técnica Dunham”, ya que estaba aportando al baile, a la danza de estudio, un concepto totalmente diferente.

La técnica de Katherine Dunham se basó en los ritmos ancestrales de la esclavitud africana en la cuenca caribeña y en el movimiento aislado de las diferentes partes del cuerpo, basado en el principio de la disociación. Dunham desarrolló una teoría increíble sobre cómo se mueve el cuerpo que todavía se usa en las escuelas de baile de hoy en día. La técnica se basa en aprender cómo se mueve cada parte del cuerpo de forma separada    y en todas las direcciones posibles: cabeza, hombros, caja torácica, manos, caderas, dedos, rodillas o piernas; cubría todo el rango de movimiento del cuerpo. La construyó usando su bagaje en el ballet clásico, en el baile moderno y en el baile afrocaribeño. Y, por supuesto, añadió también sus propias ideas. Ella decía: “No soy la mejor bailarina, pero soy una importante catalizadora”. Aquí podemos ver dos vídeos ejemplo de la Técnica Dunham.

Los movimientos más impresionantes y complicados que Dunham enseñaba provenían de las Islas Martinicas. Allí los hombres realizaban un baile de lucha llamado el Agya, una fusión de combate africano y europeo. Este baile/lucha apareció porque a los esclavos no se les permitía usar armas. Se podría decir que el Agya es un arte marcial disfrazado de baile. Dunham grabó muchas imágenes durante su estancia en las Martinicas y luego las usaba con su alumnado para enseñarle los movimientos. En 1937 decidió montar una coreografía basada en su interpretación del Agya, la cual estrenó en Chicago en enero de 1938. El baile hacía referencia al amor entre un pescador y una chica y un diablo que lo impedía. Impresionante de ver, tanto el Agya como la interpretación que ella hizo.

Nueva York y la consolidación de su carrera con su compañía de baile

La obra obtuvo un éxito inmediato. Tanto que ella y su compañía de baile fueron invitados a Nueva York, a Broadway. Era el año 1940. Para esa ocasión Dunham preparó un dueto al que llamó Barrelhouse Blues sobre un chico y una chica que se encuentran en la ciudad de Chicago en invierno y empiezan a intimar y fantasear en un bar. La obra está llena de sensualidad y los movimientos y la danza son suaves y acompasados. Una pieza de baile muy blusera que creó mucha controversia para el público de 1940 dada su temática. Lo que la crítica ignoró fue el hecho de que esa pieza era una auténtica revolución del baile, una auténtica mezcla entre lo auténtico con lo artístico. Tacharon la obra de “vulgar” pero a Dunham no le importó, le gustaba el riesgo y por encima de todo buscaba que tanto el público como los bailarines experimentaran el blues, el jazz, lo espiritual de toda esta música y cultura a través de la danza. Este vídeo contiene una pequeña parte del baile.

Muchos proyectos, muchas caras y una misma causa

La celebridad puso el turbo en la vida de Dunham: impartía clases sobre cultura caribeña, escribía artículos para la revista Esquire bajo el pseudónimo Kei. Donn y triunfaba en los escenarios de Broadway y en las pantallas de Hollywood. En 1945 abrió una escuela de baile en Nueva York, que pronto se convirtió en el foco de la danza negra en América, de la danza africana. También fue la primera coreógrafa de raza negra que realizó una coreografía para el Metropolitan Opera House: Aida, en 1964.

Su compañía de baile siguió en activo durante muchísimos años. Entre 1940 y 1960 la compañía viajó por más de sesenta países en los seis continentes, siempre con un lema subliminal y potente de lucha por la igualdad y el no olvido pues Dunham también fue una mujer muy activa políticamente. Era un momento de extrema segregación y Dunham usaba su popularidad para ir contra el racismo. Ejemplo de ello es que soplaba a la prensa los nombres de aquellos hoteles a los que no se les permitía la entrada por ser negros, rechazaba contratos en aquellos lugares en los que podía acudir una audiencia segregada y daba charlas sobre los derechos civiles de los negros.

Su legado

La cultura africana, tanto en música como en danza, se desarrolló muy fuertemente en lugares como Brasil, el Caribe o la parte negra de Estados Unidos. Todos esos bailes, movimientos, lenguajes y expresiones artísticas de raíz africana se desarrollaron gracias a artistas como Katherine Dunham. Los y las artistas afroamericanas querían buscar las conexiones con su pasado y rendir homenaje a su cultura y, desde allí, desarrollar y transformar el legado que tenían. Fueron tiempos en los que la estética y la evolución de la cultura negra empezaban a unir África con las nuevas culturas negras del resto del mundo. En palabras de Dunham: “No podría haber aprendido los bailes sin conocer a las personas”.

La técnica de baile de Dunham se difundió por toda Norteamérica en universidades y centros tanto profesionales como amateurs, y ella se mantuvo en activo mientras pudo. Murió con 96 años en Nueva York. Su lema "Black is beautiful" pervive hoy en día.

A continuación, la recordamos en el día de su nacimiento, con Carnival of Rhythm, de 1941.