sábado, 9 de marzo de 2013

Nabucco



Nabucco es una tragedia lírica en cuatro partes con música de Giuseppe Verdi y libreto en italiano de Temistocle Solera, basada en el Antiguo Testamento y la obra Nabuchodonosor de Francis Cornue y Anicète Bourgeois. 

Fue estrenada el 9 de marzo de 1842 en La Scala de Milán, con la batuta de Eugenio Cavallini



La obra fue compuesta en un período particularmente difícil de la vida del compositor. Su esposa y sus dos pequeños hijos habían muerto poco tiempo antes y Verdi había decidido prácticamente no volver a componer. 

El libreto de Nabucco llegó a sus manos casi de casualidad. La composición emprendida casi a regañadientes, dio como resultado una obra que cautivó a toda Italia. 

En el estreno de la obra el elenco estuvo integrado por Giuseppina Strepponi como Abigaille, Giovannina Bellinzaghi en el rol de Fenena, Teresa Ruggeri interpretó a Anna, Corrado Miraglia en el papel de Ismael, Giorgio Ronconi en el papel protagónico de Nabucco, Prospero Derivis como Zacarías, Napoleone Marconi en el rol de Abdallo y Gaetano Rossi como el Sumo Sacerdote.

No es fácil conseguir una soprano dramática que pueda medirse con la despiadada tesitura de la malvada Abigail. El personaje ha sido considerado como la caída de numerosas cantantes. 


Giuseppina Streponi, quien años mas tarde
se convertiría en la segunda esposa del compositor 

Esta ópera fue el primer éxito importante del compositor y con ella se inician los llamados años de galera, en los que compuso a un ritmo frenético, produciendo diecisiete óperas en doce años. 

El éxito se debe en parte a las cualidades musicales de la obra y en parte a la asociación que hacía el público entre la historia del pueblo judío y las ambiciones nacionalistas de la época. 

El número más conocido de la ópera es el "Coro de los esclavos judíos," Va, pensiero, sull'ali dorate / "Vuela, pensamiento, en alas doradas." En su época, los italianos lo asimilaron como un canto contra la opresión extranjera en que vivían. Hoy en día este coro se suele bisar regularmente.


El estreno fue un rotundo éxito, convirtiéndose el autor y su coro, sin pretenderlo, en uno de los símbolos del movimiento de la unidad de Italia o Resorgimento.




Hasta tal punto llegó la fama del autor que había pintadas en las paredes de las calles con el acróstico ¡VIVA VERDI! VIVA Vittorio Enmanuel Re Di Italia, en alusión al rey Víctor Manuel de Saboya futuro rey de la Italia unificada, burlando así la censura de la policía austríaca.
























El éxito de la ópera perdura hasta hoy en día. Aunque no se ofrece tantas veces como otras óperas de Verdi, se encuentra entre las más representadas del repertorio operístico mundial.

Ha sido una obra permanente en el escenario del Metropolitan Opera House de New York desde que se representó allí por primera vez durante la temporada 1960/61. 





















A continuación la ópera completa con subtitulos en dos partes



Segunda parte