Giacomo Lauri-Volpi nació en Lanuvio, Italia, el 11 de
diciembre de 1892 y murió en Burjasot, España, el 17 de marzo de 1979. Tenor.
Estudió en la Accademia di Santa Cecilia de Roma, con Enrico
Rosati y Antonio Cotogni. Debutó el 2 de septiembre de 1919 en Viterbo, con el
papel de Arturo en la ópera I Puritani, de Vincenzo Bellini, en enero de 1920
cantó por primera vez en el Teatro Costanzi de Roma, la ópera Manon de Jules
Massenet, ese año grabó su primer disco, la Mattinata de Rugiero Leoncavallo.
En 1921 cantó en el Teatro Real de Madrid las óperas La
Bohème y Tosca y en el Gran Teatro del Liceo de Barcelona, Rigoletto, Manon y La
Favorita. Al año siguiente debutó el Teatro Alla Scala de Milán, interpretando
el duque de Mantua, de la ópera Rigoletto de Giuseppe Verdi, bajo la dirección
de Arturo Toscanini. Posteriormente cantó Cavalleria rusticana, de Pietro
Mascagni, dirigido por el autor, en Río de Janeiro.
En 1923 debutó con Rigoletto, de Giuseppe Verdi, en el
Metropolitan Opera House de Nueva York, y 2 años después, se presentó por
primera vez en el Teatro Colón de Buenos Aires, al que regresó en 1927, donde
cantó el rol de Manrico, de la ópera Il Trovatore de Giuseppe Verdi. La crítica
la consideró como una de las creaciones absolutamente insuperadas de Giacomo
Lauri-Volpi.
Otro éxito grandioso los constituyó su creación del
personaje de Arnoldo, en el Guillermo Tell de Rossini, ópera que cantó en el
centenario de su estreno, en 1930, en los principales teatros de Europa y
América.
En 1933 cantó en la Arena de Verona ‘Los hugonotes’ de Meyerbeer, otro
de los títulos infrecuentes, por su tremenda dificultad vocal, a los que el
tenor imprimió su genial estilo interpretativo.
Giacomo Lauri-Volpi, fue aclamado por el público y crítica, recibió la Orden de la Corona de Italia y el grado de oficial de la Legión de Honor en Francia.
La literatura fue la otra gran vocación del tenor, que
empezó a imponerse a mediados de la década de 1930. En 1937 publicó su libro
autobiográfico El equívoco, y 2 años más tarde escribió La pobre tierra,
inspirada en la Guerra Civil Española.
En 1947 Cristalli viventi, en 1953 A viso apert, en 1955 Voci
parallele, en 1957 Misteri Della voce umana, en 1960 La voz de Cristo. En los
últimos años de su vida, escribió Incontri scontri y Parlando a María.
El 11 de febrero de 1959 Giacomo Lauri-Volpi se despidió en
la Ópera de Roma con Il trovatore de Giuseppe Verdi. No obstante, en 1965
ofreció un concierto histórico en la Plaza Chigh de Ariccia y en 1972 participó
en la gala conmemorativa del 125 aniversario del Gran Teatro del Liceo de
Barcelona, interpretando de forma triunfal el aria Nessun dorma de la ópera Turandot,
de Giacomo Puccini.
En 1973 grabó el disco El milagro de una voz con fragmentos
de ópera y canciones sacras, y en 1975 fundó el Permio Internacional de Canto
María Ros, en homenaje a su esposa, y durante el festival de ese año cantó en
el Teatro Principal de Valencia, junto a Montserrat Caballé.
En 1988 se fundó la Asociación Internacional Lauri-Volpi,
cuya Presidencia de Honor ostenta S.M. la Reina doña Sofía, a su vez
patrocinadora de los actos conmemorativos del centenario.
A continuación, recordamos a Giacomo Lauri-Volpi, con el
aria A te o cara, de la ópera I Puritani, de Vincenzo Bellini, en un fragmento
del film La canzone del sole de Max Neufelt, de 1933.