Cleto Zavala Arámbarri nació en Bilbao, España, el 26 de abril de 1847, y murió en Madrid, España, el 1 de enero de 1912. Compositor, pianista y director de orquesta.
Su padre le dio las primeras lecciones de
música, y poco después, estudió con Nicolás Ledesma, maestro de la capilla de
Santiago de Bilbao. Posteriormente en Madrid aprendió armonía y composición, y
continuó sus estudios de piano. En el Conservatorio de Madrid estudió con
Emilio Arrieta. Regresó a Bilbao donde estrenó en 1881 la ópera La hija del
pescador, con la que obtuvo un rotundo éxito. Al año siguiente la Diputación de
Vizcaya le otorgó una beca para ampliar sus estudios en Italia. Durante 5 años
recorrió el país, se impregnó de la música culta y popular, y compuso varias
obras íntimamente ligadas al riquísimo folklore. Cuando regresó a España fue
nombrado pianista de la sociedad liberal El Sitio. Tiempo después fue nombrado
director del Orfeón Bilbaíno, más tarde llamado Sociedad Coral de Bilbao. Con
esta agrupación ganó premios en concursos en San Sebastián, Guernica, Durango,
Madrid y Barcelona, y se convirtió en uno de los mejores autores corales del
País Vasco. A mediados de la década de 1890 se interesó por el teatro lírico, y
se instaló en Madrid donde trabajó en el Teatro Apolo y en el Novedades. En
1895 estrenó las zarzuelas El señor barón y El Niño de Jerez, y en 1899
Varietés, que fueron recibidas con entusiasmo. En 1901 estrenó su ópera Marcia.
También es autor de una Misa y de varias obras corales.
A continuación, lo recordamos en el día de su nacimiento, con el pasodoble El Niño de Jerez, en la versión de la Banda Sinfónica Municipal de Madrid, dirigida por Enrique García Asensio.