Charles Bolden, más conocido como Buddy Bolden, nació en Nueva
Orleans, Luisiana, Estados Unidos, el 6 de septiembre de 1877, y murió en Jackson,
Luisiana, Estados Unidos, el 4 de noviembre de 1931. Cornetista.
El sitio www.apoloybaco.com
publicó este recordatorio.
Buddy Bolden.
Buddy Bolden, fue la primera y más resplandeciente estrella
del jazz. Un hombre con todos los rasgos genéticos del negro “criollo” de New
Orleáns. Capaz de tumbar a cualquiera en la ingesta de alcohol, mujeriego y
bravucón, con una conducta habitualmente rayana en la violencia y que fue
proclamado en los primeros años del siglo XX, como la mejor corneta del jazz de
toda New Orleáns. La leyenda de Buddy Bolden se acrecentó por el hecho de no
haber disponibles ninguna grabación suya – desapareció de la escena del jazz, muchísimo
antes de que la industria discográfica comenzara a andar – y sin embargo los
que tuvieron la fortuna de escucharlo, hablaban de él y de su sonido con la
corneta como el hombre que tocaba el blues más lento y persuasivo de todos los
músicos conocidos.
Buddy Bolden, procedía del distrito negro de New Orleáns y
siendo adolescente, participó en diversas bandas de música entre 1890 y 1895.
Aquél año ya formó su propio grupo, junto al guitarrista, Charlie Galloway
desde donde actuaba en convites, ceremonias y fiestas. Con el nuevo siglo, su
sonido de corneta ya era famoso y se destacaba por la rítmica del mismo, su
amplia sonoridad y adobado con espléndidas dotes de animador, lo que le
confirió gran popularidad entre sus contemporáneos. Su estilo, depurado y
madurado, le permitió en la primera década del siglo XX, llamar la atención por
su inclusión de rags, y aunque no está demostrado que en su repertorio hubiera
improvisación, si se esmeraba en tocar los blues con gran variedad en los tonos
y con un sentido del ritmo exageradamente lento, lo que hacía las delicias del público.
La conducta errática de Bolden, sus problemas con la
justicia – fue detenido y encarcelado el día del trabajo de 1906 – y su
adicción al alcohol, le provocaron un grave trastorno mental que lo llevó a ser
ingresado por su familia en un hospital para enfermos mentales en Jackson
(Louisiana) donde permaneció hasta su muerte en 1931. Murió sin conocer el auge
y el brillo de la época del swing, de la que fue el primer precursor.