viernes, 17 de marzo de 2023

Aniversario del estreno del oratorio Salomón HWV 67, de Georg Friedrich Händel.


Salomón HWV 67 es un oratorio en tres actos, con música de Georg Friedrich Händel, y libreto de autor desconocido, basado en las historias bíblicas del sabio rey Salomón del Primer Libro de los Reyes, el Segundo Libro de Crónicas, y en las Antigüedades judías de Flavio Josefo.

La partitura fue compuesta entre el 5 de mayo y el 13 de junio de 1748. El estreno se realizó el 17 de marzo de 1749, en el Covent Garden de Londres.

A continuación, el oratorio Salomón HWV 67, de Georg Friedrich Händel, en la versión de Iestyn Davies como Salomón, Gillian Webster en el papel de la Reina de Saba, y la segunda prostituta, Sarah Tynan en el personaje de la esposa del Rey Salomón, y la primera prostituta, Jeremy Ovenden es Zadok, y Peter Harvey como un levita, y el Conjunto Vocal e instrumental Gabrieli Consort & Players, dirigidos por Paul McCreesh.


La acción se desarrolla en Jerusalén, en el año 950 a. C. aproximadamente.

Primer acto: La construcción del Templo en Jerusalén.

Al comienzo de la obra, Salomón y el pueblo hebreo celebran la consagración del templo que acaba de construirse en la Ciudad Santa. El Rey se regocija en su matrimonio con su única esposa (libertad que se toma con el relato bíblico, que relata que tuvo cientos de esposas y concubinas), y promete construirle un majestuoso palacio. Luego, la pareja expresa su amor mutuo antes de retirarse a dormir, mientras la brisa fragante con aromas florales y el canto de los ruiseñores los invitan a descansar.

Segundo acto: El juicio de Salomón.

La sabiduría legendaria del hijo de David queda ilustrada por la historia de las dos prostitutas que se pelean para ser reconocidas, cada una de ellas, como la madre de un bebé que se le presenta. Salomón les propone resolver su discordia cortando al niño en dos con su espada, para dar la mitad a cada uno. Horrorizada, la verdadera madre rechaza la propuesta aceptando dejar el bebé a la otra mujer. El Rey reconoce así que su instinto maternal ha hablado y que ella es realmente la madre del niño y no la otra mujer.

Tercer acto: El encuentro con la Reina de Saba.

La Reina de Saba viene a visitar la corte del hijo de Betsabé y éste acude con la ayuda de su pueblo para deleitarla con una música con grandiosos coros. Cada uno evoca a su vez la languidez de la música suave, la búsqueda de la gloria militar, la desesperación del amante despreciado y la tormenta que acaba por calmarse. Todos celebran el Reino de Israel gobernado por su sabio rey, personificando una edad dorada de paz, felicidad y prosperidad.