Cornell MacNeil nació en Minneapolis, Minnesota, Estados
Unidos, el 24 de septiembre de 1922 y murió el 15 de julio de 2011. Barítono.
Estudió con Friedrich Schorr, entonces profesor en la Hartt
School of Music de Hartford y actuó en varios musicales en Nueva York,
alternando trabajos como operario en un teatro y en una fábrica.
En 1950 debutó profesionalmente en “El Consul” por elección
de Gian Carlo Menotti, tras haberlo escuchado cantar “Eri tu”.
Es el compositor quien le sugirió estudiar el repertorio
tradicional y tras más de dos años de preparación, se unió a la compañía de la
New York City Opera con la que debutó en 1953 con “La Traviata” de Giuseppe
Verdi.
Durante tres temporadas cantó los roles de Escamillo,
Rigoletto y Valentin, entre otros.
Su carrera comenzó a despegar con los debuts en San
Francisco en 1955 y en Chicago en 1957, pero es la recomendación de Giuseppe di
Stefano al Teatro Alla Scala de Milán, la que precipitó su presentación en
1959.
A pesar de no haber dispuesto de ensayos, tal fue el éxito
que Ghiringhelli le ofreció un contrato al concluir la representación de
“Ernani”.
Dieciséis días después apareció en el Metropolitan Opera de
New York como Rigoletto y se convirtió en el principal barítono del teatro,
tras la muerte de Leonard Warren, y durante casi dos décadas.
Las compañías discográficas mostraron interés en MacNeil,
aunque de forma intermitente.
En junio de 1959 trasladó su residencia familiar a Roma, con
la intención de perfeccionar el idioma y su pronunciación llegó a ser
impecable.
De esta forma, MacNeil logró el favor de los públicos
peninsulares, hecho insólito en un cantante norteamericano.
Las ciudades de Roma, Palermo, Parma y Génova se unieron al
entusiasmo milanés durante la década de los 60.
Se presentó en el Teatro Colón de Buenos Aires donde cantó
en doce temporadas entre 1960 y 1972 abordando Rigoletto, Simon Boccanegra,
Nabucco, Tonio, Amonasro, Miller, Renato, Barnaba, Scarpia, Don Carlos, Ernani,
el Conde de Luna y Michele de Il Tabarro.
Sin embargo es en New York donde acumuló el mayor número de
sus actuaciones: seiscientas cuarenta y tres hasta diciembre de 1987, cuando se
despidió con “Tosca” debido a sus problemas cardiacos.
Cornell MacNeil fue uno de los máximos exponentes de su
cuerda de barítono en las décadas de 1950 al 1980 y uno de los baluartes del
Metropolitan Opera de Nueva York.
Desde ese momento su vida transcurrió tranquilamente entre
Ontario y Virginia, y apenas relacionada con el mundo de la ópera.
Cornell MacNeil murió el 16
de julio de 2011 a los 88 años.