Andrée Geulen-Herscovici nació en Bélgica, el 6 de septiembre de 1921. Maestra.
Andrée Geulen, una maestra de 20 años de una escuela de Bruselas, tomó consciencia por primera vez de la persecución de los judíos cuando algunos de sus alumnos arribaron un día con la Estrella de David amarilla cosida a sus ropas. Como muchos otros belgas Geulen no había prestado demasiada atención a las medidas antijudías.
Pero en el momento en que tuvo que confrontarse con las discriminaciones que sufrían sus alumnos, decidió actuar. Ordenó a todos los niños vestir guardapolvos para ir al colegio y de ese modo hizo cubrir la señal de humillación impuesta a los judíos.
Geulen comenzó a ocuparse del rescate de judíos después de conocer a Ida Sterno, una judía que militaba en la organización clandestina Comité de Défence des Juifs - Comité de Defensa de los Judíos - que necesitaba de una colaboradora no judía para acompañar a niños judíos a los lugares de escondite.
Geulen recibió un seudónimo - Claude Fournier - y debió abandonar la casa de sus padres y trasladarse al internado donde trabajaba. La escuela Gaty de Gamont estaba profundamente involucrada en la tarea de ocultar niños judíos. Por iniciativa de la directora, Odile Ovart, doce alumnos judíos estaban escondidos allí.
En mayo de 1943 la escuela sufrió una redada de los alemanes
en medio de la noche. Se sospecha que la redada fue consecuencia de una
delación. Los alumnos fueron despertados brutalmente y arrrastrados fuera de
sus camas con el próposito de controlar sus identidades.
La oportunidad había
sido elegida con astucia, durante la festividad de Pentecostés, cuando la
mayoría de los alumnos no judíos se encontraban con sus familias, mientras que
los alumnos judíos, que no tenían adonde ir, permanecían en el colegio. Todos
fueron arrestados y los profesores interrogados.
Andrée Geulen no demostró temor alguno y cuando los alemanes le preguntaron si no se avergonzaba de enseñar a niños judíos les respondió con audacia: "¿No os avergonzáis de hacer la guerra a niños judíos?"
Andrée Geulen con Ida Sterno |
Andrée Geulen no demostró temor alguno y cuando los alemanes le preguntaron si no se avergonzaba de enseñar a niños judíos les respondió con audacia: "¿No os avergonzáis de hacer la guerra a niños judíos?"
Geulen se las ingenió para evadir el arresto pero Odile
Ovart y su esposo fueron detenidos y deportados a un campo de concentración en
Alemania, en donde ambos perecieron. El matrimonio Ovart fue reconocido como
Justo de las Naciones por Yad Vashem.
Andrée Geulen con uno de sus sobrevivientes durante una visita al Museo Histórico de Yad Vashem, 2007 |
El incidente no disuadió a Geulen de continuar su tarea ilegal. Por el contrario esa misma noche, luego de abandonar el colegio, fue a avisar sobre la redada a los alumnos judíos que conocía y los previno de no regresar al mismo. Su participación en las tareas de rescate se volvió más activa aún y empezó a vivir en forma clandestina. Rentó un apartamento con Ida Sterno bajo el nombre falso que usaba. El contacto con las organizaciones clandestinas se mantenía a través de casillas de correos secretas, una de ellas situada en una tienda de anticuario.
Durante más de dos años Andrée reunió niños y los llevó a
familias cristianas o a monasterios. Ella se aseguraba que las familias podían
albergar a los niños y los seguía visitando y velando por sus necesidades.
"Ida y yo íbamos a recoger a los niños de aquellos padres que nos
solicitaban ayuda. Les decíamos que
preparasen una maleta y que estaríamos de regreso dentro de uno o dos días...
Todavía lloro cuando pienso en los momentos en que teníamos que llevarnos a los
niños , especialmente los que tenían 2 ó 3 años, sin poder decir a los padres
ádonde los éstabamos llevando".
Al salir para una misión ella retenía en su memoria los nombres y direcciones, pero también anotaba en una lista secreta los nombres falsos y verdaderos de centenares de niños escondidos, muchos de los cuales nunca volvieron a ver a sus padres.
Libreta de Andrée Geulen en las que anotaba los niños bajo su cuidado |
Al salir para una misión ella retenía en su memoria los nombres y direcciones, pero también anotaba en una lista secreta los nombres falsos y verdaderos de centenares de niños escondidos, muchos de los cuales nunca volvieron a ver a sus padres.
En mayo de 1944 Ida Sterno fue arrestada y confinada al
campo de Malines. Geulen tuvo que pasar a la clandestinidad. No obstante visitó
a Ida en Malines bajo un nombre falso y continuó con la tarea de ambas hasta el
último momento.
Después de la liberación Geulen se mantuvo ocupada
trabajando en sentido inverso, el de recoger a los niños de las familias
adoptivas para devolverlos a los padres. A través de los años mantuvo el
contacto con "sus niños", siempre logrando sorprenderlos con la
memoria de los detalles sobre su niñez y escondite.
En 1989 Andrée Geulen fue reconocida como Justa de las
Naciones. Veintiocho años más tarde llegó para otra visita a Yad Vashem, en la
ocasión de una conferencia sobre los niños ocultados en Bélgica. En esa
oportunidad, en una ceremonia especial le fue conferida la ciudadanía honoraria
del Estado de Israel.