Komitas

Soghomon Gevorgi Soghomonian, más conocido como Komitas, nació en en Kütahya, actual Turquía, el 26 de septiembre de 1869, y murió en París, Francia, el 22 de octubre de 1935. Compositor, cantante, director de coro, y musicólogo.

El sitio www.komitas.am publicó este recordatorio.

BIOGRAFÍA DE KOMITAS

Komitas, alias Soghomon Soghomonyan, nació el 26 de septiembre de 1869 en Anatolia, Turquía, en la localidad de Koutina (Ketaia). Su padre, Gevorg Soghomonyan, era zapatero, pero también componía canciones y tenía una hermosa voz. La madre del compositor, Tagui, también fue destacada por sus vívidas habilidades musicales; ella era tejedora de alfombras.

La infancia de Komitas fue triste y llena de privaciones. Perdió a su madre cuando tenía menos de un año, y debido a que su padre estaba demasiado ocupado, su abuela lo cuidó. A los 7 años, Komitas ingresó a la escuela primaria local. Tan pronto como terminó la escuela, su padre lo envió a Broosa para continuar su educación. Sin embargo, fracasó y 4 meses después regresó a casa y finalmente quedó huérfano: su padre falleció y Soghomon tenía solo 11 años…

“Era un niño frágil, débil, pálido, siempre atento y amable. Iba mal vestido”, recordó uno de sus compañeros sobre Komitas.

A menudo se veía a Soghomon durmiendo sobre las frías piedras del lavadero.

Sabía cantar perfectamente, y no es de extrañar que en Koutina lo apodaran “un pequeño cantante vagabundo”.

Por su deliciosa voz, Soghomonyan también estaba en deuda con un evento que cambió fundamentalmente el curso completo de su vida.

En 1881, el sacerdote de Koutina, G. Dertsakyan, tuvo que partir hacia Echmiadzin para ser ordenado obispo. A petición de los católicos, llevó al talentoso niño huérfano para estudiar en el Seminario de la Iglesia Echmiadzin. Soghomon, de doce años, fue seleccionado entre los otros 20 huérfanos para estudiar en el Seminario. Como estaba prohibido hablar armenio en ese momento, el niño hablaba turco y al ser recibido por el Catholicos Gevorg IV, respondió: "No hablo armenio, si lo desea, cantaré". Luego, con su fina voz de soprano, cantó un sharakan armenio (un himno de la iglesia) sin entender la letra.

En 1890 Soghomon fue ordenado monje.

En 1893 terminó sus estudios en el seminario, luego fue ordenado "Vardapet" (sacerdote) y adquirió su nuevo nombre "Komitas", el nombre del destacado poeta del siglo VII, autor de sharakans. En el seminario, a Komitas se le asignó la enseñanza de música.

Junto con la enseñanza, Komitas organizó un coro, una orquesta de instrumentos folclóricos y trató canciones populares; realizó las primeras investigaciones en el campo de la música eclesiástica armenia.

En 1895, Komitas fue ordenado archimandrita. En el otoño del mismo año se fue a Tiflis para estudiar en la escuela de música. Sin embargo, cuando conoció al compositor Makar Yekmalyan, quien había recibido su educación en el conservatorio de Petersburgo, cambió de opinión y comenzó a estudiar un curso de armonía de ese compositor. Estos estudios se convirtieron en el precursor original y la base firme para adquirir la técnica europea de composición.

Los sucesos posteriores de la vida de Komitas tuvieron que ver con el gran centro de música de Europa: Berlín, donde fue a estudiar bajo la protección de los católicos, financiado por el mayor magnate petrolero armenio, Alexander Mantashyan.

Komitas entró en el conservatorio privado del profesor Richard Schmidt. Dentro del conservatorio Komitas tomó clases particulares de canto, elaborando su hermosa voz, fina barítono. Paralelamente a estas clases, también asistió a las conferencias de Filosofía, Estética, Historia General e Historia de la Música. Durante estos años académicos tuvo la oportunidad de “comunicarse” con la música europea, enriqueciendo continuamente la oferta de conocimientos y participando en la crítica musical. Por invitación de la Asociación Internacional de Música, impartió conferencias dedicadas a la iglesia armenia y la música contemporánea en comparación con la música turca, árabe y kurda.

En septiembre de 1899 Komitas regresó a Echmiadzin y comenzó su actividad musical de inmediato. En poco tiempo cambió radicalmente el sistema de enseñanza de la música en el seminario, organizó una pequeña orquesta y perfeccionó el nivel de interpretación del coro.

Visitó varias regiones de Armenia tratando y escribiendo miles de canciones armenias, kurdas, persas y turcas.

Comenzó un serio trabajo de investigación científica, estudió el folklore armenio y las melodías de la iglesia y trabajó en el desciframiento de los khazzes armenios y en la teoría de las voces. En varios países del mundo, Komitas apareció como intérprete y propagandista de la música armenia.

El compositor empezó a pensar en formas musicales grandes y monumentales. Tenía en mente crear la epopeya musical "Sasna tsrer" y continuó trabajando en la ópera "Anush", que comenzó en 1904.

Komitas se centró en los temas relacionados con la música folclórica y reveló el contenido de las canciones populares. Sin duda, tal visión del mundo tenía que resultar en un conflicto ineludible entre Komitas y la Iglesia. Poco a poco la indiferencia de los nuevos líderes, la actitud negativa del grupo atrasado de las figuras eclesiásticas, el chisme y la calumnia aumentaron tanto que envenenó la vida del compositor: el hombre que quedó en la imaginación de los contemporáneos como un hombre absolutamente mundano.

El conflicto se volvió tan tenso que Komitas envió una carta a los católicos pidiéndole que lo liberara y lo dejara crear y vivir tranquilamente. Esta solicitud quedó sin respuesta y la persecución de Komitas se hizo más evidente.

En 1910, Komitas dejó Etchmiadzin y se fue a Constantinopole. Allí esperaba encontrar el entorno que lo entendería, lo protegería y alentaría su actividad; y aquí podría cumplir sus sueños. Komitas quería establecer un Conservatorio Nacional con el que conectara el futuro destino de la música de su pueblo. Pero el compositor no logró este plan (ni tampoco muchos otros). Sus inspiradas ideas sólo se enfrentaron con la fría indiferencia de las autoridades locales.

En Constantinopole Komitas organizó un coro mixto de 300 hombres y lo llamó "Gousan". Fue muy popular. Las canciones populares armenias constituyeron la mayor parte de su programa de conciertos.

Komitas solía pasar su tiempo de gira, dando presentaciones y conferencias; también actuó como solista y director. Tenía el barítono, original por su riqueza y expresividad. Debido a la amplia gama de su voz, Komitas también podía cantar parte del tenor. También domina maravillosamente la flauta y el piano. Estaba dotado de un gran poder para influir en su audiencia.

Los músicos reconocidos: Vincent D'Andy, Gabriel Fore, Camille Sen-Sans… se enamoraron del trabajo creativo de Komitas.

En 1906, después de uno de los conciertos, el destacado compositor francés Claude Debussy exclamó emocionado: “¡Brillante padre Komitas! ¡Me inclino ante tu genio musical! "

En Constantinopla, Komitas no pudo encontrar personas incondicionales de ideas afines que lo ayudaran a implementar sus planes. Además, mientras estuvo en Echmiadzin junto con su gente nativa y cercano a su estilo de vida y arte, en Constantinopla fue privado de él. Sin embargo, continuó trabajando duro. Komitas prestó especial atención a la composición de música religiosa. Su obra maestra "Patarag" ("Liturgia") está escrita para el coro masculino.

La musicología también fue un campo importante para él. En París, en la Conferencia de la Sociedad Internacional de Música, hizo dos presentaciones: “Música folclórica armenia” y “Sobre la notación antigua y nueva de la música espiritual armenia”. Estos provocaron un gran interés entre los participantes de la conferencia. También se solicitó a Komitas que hiciera una presentación espontánea sobre el tema: "El tiempo, el lugar, la acentuación y el ritmo de la música armenia".

En el período de la Primera Guerra Mundial, el gobierno de los Jóvenes Turcos inició su monstruoso programa de exterminio violento e inhumano de parte del pueblo armenio. En abril de 1915, Komitas fue arrestado junto con un gran número de destacados escritores, publicistas, médicos y abogados armenios. Después del arresto, acompañado de violencia, fue deportado a un lugar lejano de Anatolia, donde se convirtió en testigo del brutal exterminio de las mentes brillantes de la nación. Y a pesar de que debido a la intervención de personajes influyentes Komitas fue devuelto a Constantinopla, la pesadilla que había vivido dejó una profunda impresión ineludible en su alma. Komitas permaneció aislado del mundo exterior,

En 1916, la salud de Komitas se deterioró y fue internado en un hospital psiquiátrico. Sin embargo, no había esperanzas de que se recuperara. La medicina fue impotente contra la enfermedad destructiva.

El genio de la música armenia encontró su refugio final en París, en el sanatorio suburbano Vil-Jouif donde pasó casi 20 años de su vida.

El 22 de octubre llegó a su fin la vida de los Grandes Komitas. En la primavera de 1936, sus restos fueron transportados a Armenia y enterrados en Ereván, en el Panteón de destacadas figuras del arte.

No menos trágico fue el destino del legado creativo de Komitas. La mayoría de sus manuscritos fueron destruidos o perdidos en todo el mundo…

“El pueblo armenio encontró y reconoció su alma, su naturaleza espiritual” en las canciones de Komitas. Komitas Vardapet es un comienzo que no tiene fin. Vivirá a través del pueblo armenio, y ellos deben vivir a través de él, ahora y siempre”. (Vazgen I, el Catholicos de todos los armenios)

A continuación, lo recordamos en el día de su nacimiento, con Kroonk, en la versión de Maxim Vengerov en violín, junto a la Orquesta Nacional de Bélgica, dirigida por George Pehlivanian.