El estreno se realizó el 24 de enero de 1875, en París, y la
obra describe a la Muerte tocando el violín a medianoche. A su ritmo, los
esqueletos bailan alrededor de una tumba. Al amanecer, con el canto del gallo,
los muertos vuelven a sus tumbas.
El poema original de Henri Cazalis es el siguiente:
Zig y zig y zag, muerte en ritmo
Golpeando una tumba con su talón,
La muerte a la medianoche juega una canción de baile,
Zig y zig y zag, en su violín.
El viento invernal sopla y la noche es oscura
Los gemidos salen de los tilos;
Los blancos esqueletos pasan por las sombras
Corriendo y saltando bajo sus grandes mortajas,
Zig y zig y zag, todo el mundo se menea,
Escuchamos los huesos de los bailarines,
Una pareja lujuriosa se sienta en el musgo
como para saborear viejos dulces.
Zig y zig y zag, la muerte continúa
rasgando incansable su agrio instrumento.
¡Un velo cayó! ¡La bailarina está desnuda!
Su bailarín la abraza con amor.
La dama es, se dice, marquesa o baronesa.
Y el lozano pretendiente, un pobre carretero, ¡horror!
Y ahora ella se abandona a sí misma
¡Como si el patán fuera un barón!
Zig y zig y zig, ¡qué zarabanda!
¡Qué círculos de muertos cogidos de la mano!
Zig y zig y zag, vemos en la banda
¡El rey brincar con el villano!
Pero ¡chis! de repente dejamos el corro,
Nos alejamos a empujones, huimos, el gallo ha cantado.
¡Oh! ¡Qué noche hermosa para el pobre mundo!
Y viva la muerte y la igualdad.
A continuación, el Poema Sinfónico La Danza Macabra, de
Camille Saint-Saëns, en la versión de Alice Combernoux en violín, Jean-Philippe
Biojout, bajo barítono, y la Orquesta Sinfónica del Campus de Orsay, dirigida
por Martín Barral.