martes, 22 de septiembre de 2020

José Maurício Nunes Garcia


José Maurício Nunes Garcia nació en Río de Janeiro, Brasil, el 22 de septiembre de 1767, y murió en su ciudad, el 18 de abril de 1830. Sacerdote y compositor.

El sitio www.mcnbiografias.com publicó este recordatorio firmado por Cipriano Camarero Gil.

Nunes Garcia, José Maurício (1767-1830).

Sacerdote, compositor y organista brasileño, nacido en 1767 en Río de Janeiro y fallecido en la misma ciudad en 1830, cuyo talento excepcional lo convierte en el más notable compositor brasileño de música sacra de su época.
 
Hijo de padre brasileño y de madre africana, tuvo que soportar a lo largo de su vida muchas humillaciones a causa del color de su piel. A la muerte de su padre, hubo de ayudar al sostenimiento de su familia ejercitando el don de la música cantando y tocando el violín y el piano. A los 15 años ya se presentaba en conjuntos y daba clases particulares de música. Compuso su primera pieza en 1783, Tota pulchra es Maria. Ordenado sacerdote en 1792, se dedicó a componer un gran número de obras litúrgicas. Fundó en su propia casa una escuela de música, donde enseñó a grandes maestros, como Francisco Manuel da Silva y Cândido Inácio da Silva. A él se debe la introducción en Brasil de obras de famosos músicos europeos, como el Requiem de Mozart, y La Creación de Haydn.
 
Al trasladarse en 1808 la corte portuguesa a Río de Janeiro, García fue nombrado maestro de la Capilla Real. Con la corte, se trasladaron también los músicos de la misma, lo cual supuso para Nunes Garcia un verdadero desafío, pues ningún europeo aceptaba de buen grado ser dirigido por un brasileño, y menos mulato. Para hacer frente a esta situación, el rey mandó venir de Portugal al compositor oficial de la Corte, Marcos Portugal, al cual nombró maestro de capilla, en sustitución de José Maurício. En la práctica sucedió que el portugués quedó responsable de la música profana, y el brasileño, de la música sacra. Así, al morir la madre del rey Juan VI, María I, José Mauricio fue el encargado de componer la música en su honor, su afamado Requiem.
 
En 1822, al declararse la independenica de Brasil, los músicos de la antigua Corte perdieron sus subvenciones, por lo que José Mauricio se vio reducido a la pobreza y a componer sólo por encargo de alguna iglesia. Su última (pero monumental) obra fue la Missa Festiva (1826), compuesta por encargo de la Hermandad de Santa Cecilia.
 
Aunque se cree que compuso más de 500 obras, sólo se conocen unas 250 piezas suyas. Algunas de sus obras más importantes fueron las series de Graduais (1798-1800), de los Misereres (1798) y las Matinas de Natal (1799); además de las obras Missa em Si Bemol, Missa de Defuntos, Magnificat y Missa de Réquiem. Entre sus composiciones dramáticas destacan Ulissea, drama eroico y O triunfo da América (1809). Además escribió una obra teórica, el Compêndio (1821), sobre los elementos básicos de la música.
 
En la música de Nunes Garcia se descubre la influencia de los músicos alemanes, así como la de algunos músicos mineiros (de Minas Gerais). También introdujo en sus composiciones, elementos de la música popular brasileña, como las modinhas.
 
Autor Cipriano Camarero Gil

A continuación, recordamos a José Mauricio Nunes García en el día de su nacimiento, con el Réquiem compuesto en 1816, en la versión de los solistas Carolina Faria, Mauricio Luz, Veruschka Mainhardt, Geilson Santos, junto al Coro y la Orquesta Sinfónica de Río de Janeiro, dirigida por Ernani Aguiar.