sábado, 4 de mayo de 2013

Samuel Eichelbaum



Samuel Eichelbaum nació en Villa Domínguez, Entre Ríos, el 14 de noviembre de 1894 y murió en Buenos Aires, el 4 de mayo de 1967.

Fue un escritor, periodista, dramaturgo, crítico y traductor argentino.

Hijo de un inmigrante judío ruso, aprendió en su provincia natal las difíciles condiciones del campesinado a principios del siglo XX, que supo reflejar posteriormente en sus dramas junto a la turbulenta política de la época, rompiendo con la superficialidad del criollismo de entonces.

Siendo aún un adolescente emigró a Buenos Aires y cultivó el periodismo.

Escribió para La Vanguardia, Caras y Caretas, La Nota, crítica literaria para Noticias Gráficas y Argentina Libre y estrenó sus primeras obras dramáticas, que se inscriben dentro del Naturalismo, con apuntes costumbristas y una gran sensibilidad al habla vulgar.

Ejemplos de esa etapa, El lobo manso de 1917, En la quietud del pueblo de 1919, La mala sed de 1920, El ruedo de almas de 1923 y La hermana terca de 1924, entre otras.

De ideología socialista, muchas de ellas fueron representadas por la Agrupación Artística Juan B. Justo.

A partir de 1940 empieza su segunda época dramática: Cuando tengas un hijo de 1929, Señorita de 1930, Soledad es tu nombre de 1932, En tu vida estoy yo de 1934, El gato y su selva de 1936 y Pájaro de barro de 1940.

Sus piezas más famosas y que fueron varias veces adaptadas al medio cinematográfico fueron las ambientadas en escenarios suburbanos: Un guapo del 900 de 1940 y Un tal Servando Gómez de 1942.



En 1943 fue como delegado al Congreso de Sociedades de Autores en Washington; ocupó la presidencia de la SADE, fue miembro de Argentores y en sus últimos años estuvo ligado a la carrera diplomática como agregado cultural de la Embajada Argentina en Uruguay.

Ejerció también el trabajo de guionista cinematográfico con obras como El pendiente o Arrabalera.

Su labor narrativa se compone de las novelas Tormento de Dios, El viajero inmóvil y del libro de relatos Un monstruo en libertad.

Premiado en muchas oportunidades por diferentes organismos e instituciones, Eichelbaum, se definía como “un maniático de la introspección”, creó a lo largo de medio siglo de carrera dramática una obra donde los personajes solitarios y atormentados eran la regla general, siempre fiel a su afán experimentador y a su creencia de que el teatro es ante todo un “drama interior” producido por crisis morales conscientes o inconscientes y que la poesía dramática se nutre esencialmente de la psicología.

Se lo considera como uno de los cuatro mejores autores dramáticos argentinos de su época, junto a Roberto Arlt, Conrado Nalé Roxlo y Armando Discépolo.

En un guapo del 900 el mérito más importante de este texto, es la rica carnadura dramática de sus dos personajes centrales: Ecuménico López y su madre, Natividad.


Fue estrenada en 1940 por Francisco Petrone y Milagros de la Vega y llevada al cine con Alfredo Alcón y Lydia Lamaison.

También fue recreada en otras versiones para lucimiento de actores como China Zorrilla, Rodolfo Bebán o Jorge Salcedo.

Los principales personajes son:

Alfredo Alcón, como Ecuménico López, Arturo García Buhr como Alejo Garay, Élida Gay Palmer como Edelmira Carranza de Garay, Lydia Lamaison como Doña Natividad y Duilio Marzio como Clemente Ordóñez.

Un guapo del 900, dirigida por Leopoldo Torre Nilsson sobre su propio guion escrito en colaboración con Samuel Eichelbaum, se estrenó el 17 de agosto de 1960.